Las
palmeras de la
foto levantan sus brazos y su voz mas allá de los límites del sol... alcanzan el infinito... pppacooooooooooooooo! Y el infinito no devuelve la resonancia porque
palmera, brazos y voz han sido -posiblemente- succionadas en la vorágine de un poderoso agujero negro.
Sensi, saludillos.