Las situaciones de verdadero empobrecimiento y deshumanización que padece hoy el mundo obrero son consecuencia de la especulación financiera y del egoísmo desmedido de las personas que gestionan los mecanismos de las entidades financieras. Un egoísmo impulsado por el sistema económico capitalista y que ha penetrado con intensidad en la sociedad a través del consumo, provocando una grave crisis ética, alimentaria, ecológica… y humanitaria sin precedentes. Siendo, pues, responsables de la actual crisis económica los especuladores financieros ¿No es TREMENDA CANALLADA pretender, en España, que la paguemos funcionarios y pensionistas?