Hola Maria, siento lo del marido de tu tia, es una pena una persona tan
joven, pero nunca sabemos cuando nos llegará la hora. Lo siento.
¿Como fué la
paella? me imagino que de rechupete, ojalá en Turkia hubiese encontrado una paella, que nos habríamos puesto morados.
Hasta pronto, un beso.