PEDRO MARTINEZ: BISTORIA HERES UN ENCanto nunca te cansas de mandar...

Y temblaba tu cintura
como un palomo cautivo,
y nueve lunas de sombra
brillaban en tu delirio.
Yo te escuchaba, distante,
entre mis versos perdido,
pero sentí por la espalda
correr un escalofrío...
Y repetí como un eco:
" ¡Cuando tengamos un hijo!..."
Tú, entre sueños, ya cantabas
nanas de sierra y tomillo,
e ibas lavando pañales
por las orillas de un río.
Yo, arquitecto de ilusiones
levantaba un equilibrio
una torre de esperanzas
con un balcón de suspiros.

Buenos dias
Fina te deseo un bonito dia
Un beso

BISTORIA HERES UN ENCanto nunca te cansas de mandar
bonitas poesias
como estas te mando un beso