PEDRO MARTINEZ: BOABDIL. Ultimo Rey moro en Granada...

BOABDIL. Ultimo Rey moro en Granada
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Emir de Granada desde 1482-1483 cuando su tío El Zagal se hizo con el poder. Volviendo a conquistar el emirato En 1486 hasta que entregó por el asedio sometido por los Reyes Católicos Granada en 1492.
Su predecesor fué Muley Hacén, su padre.

Tras el asedio y reconquista del Reino de Granada la dinastía Nazarí así como el último reducto musulmán de España llegó a su fin.

Destacar que fueron más los años que el Reino de Granada fue musulmán que desde la reconquista hasta la actualidad.

Información personal

Nombre secular Abū ʿAbd Allāh Muhammad ibn ʿAlī (أبو عبد الله محمد ابن علي)
Nacimiento en la Granada de la época Nazarí (Palacios de La Alhambra) en 1459 y falleció en Fez (Marruecos) en 1533. Su consorte fue Morayma Athar e hijo de Muley-Hacén y de Aixa

Abû ʿAbd Al·lâh «az-Zughbî» Mohammed ben Abî al-Hasan ʿAlî (أبو عبد الله محمد ابن علي) (Granada, 1459 – Fez, 1533) fue el último rey de Granada, conocido como Muhámmad XII (quizás fue el undécimo sultán que llevaba el nombre de Muhámmad, y no el duodécimo, como gracias a la Yunna de Ibn ʿĀṣim podemos deducir ahora), miembro de la dinastía nazarí, llamado por los cristianos Boabdil o Boabdil el Chico y conocido popularmente en su tiempo con el sobrenombre الزغابي Al-Zugabi, "el Desdichado". Fue llamado por los castellanos y aragoneses "el Chico" no por su tamaño sino por su menor edad comparado con su padre y tío. Abú Abdil·lah en dialecto árabe granadino.

Quitó el trono a su padre, Muley Hacén y durante un tiempo estuvo en disputa por éste tanto con él, como con su tío, el Zagal. Abu 'Abd Allāh, en el habla granadina, debía pronunciarse como Bu Abdal-lah o Bu Abdil-lah, y de ahí el nombre castellano Boabdil, a quien se añadió el epíteto de "el Chico" para distinguirlo de su tío Abu 'Abd Allāh "el Viejo".

Biografía

Nacido en la Alhambra, hijo de Muley Hacén y la sultana Aixa, se sublevó en Guadix contra su padre en 1482 y accedió al trono gracias al apoyo de los Abencerrajes y de su propia madre. Combatió a su padre y su tío, quienes también se consideraban legítimos reyes de Granada.

Durante la batalla de Martín González, en el término municipal de Lucena, fue apresado por los Reyes Católicos. Su liberación implicó dar a Castilla la parte del reino que gobernaba el Zagal, lo que favoreció la penetración castellana y la finalización de la guerra el 2 de enero de 1492 con la toma de Granada por los Reyes Católicos. Boabdil se aseguró la colaboración de las tropas castellanas en su exilio a Fez en 1493 ante la posibilidad de una rebelión del bando opuesto.

En 1492, los Reyes Católicos entran en Granada como castigo por la negativa de este reino a pagar los tributos que le exigen. En la Capitulación de Granada se establece que Boabdil ostentará el señorío de las Alpujarras y parte a Laujar de Andarax, donde establecerá su residencia.

Según una extendida leyenda española cuya veracidad no está atestiguada por ninguna documentación, al salir de Granada camino de su exilio en las Alpujarras, cuando coronaba un collado, volvió la cabeza para ver su ciudad por última vez y lloró, escuchando de su madre la sultana Aixa:

«Llora como una mujer lo que no supiste defender como hombre»

Sultana Aixa, madre de Boabdil.
Debido a esto ese monte recibe el nombre del Suspiro del moro. Esta leyenda parte de la imaginación del padre Echevarría que en el siglo XVIII publica el libro Los Paseos de Granada en los que pretende denigrar la figura de Boabdil.

En su exilio alpujarreño, se instaló en la población almeriense de Laujar de Andarax siendo ésta su última residencia en la península ibérica. En Laujar, en 1493 falleció la última sultana de Granada, Morayma, esposa de Boabdil. En 1493 abandona la península con destino a Fez tras vender a los Reyes Católicos los derechos de su señorío y recoger los restos de sus antepasados en Mondújar, junto a Talará (Granada).

Semblanza

Julio Quesada-Cañaveral, VIII Duque de San Pedro de Galatino, en su Tesis Doctoral sobre Boabdil, lo describe así:

Boabdil era rubio, de mediana estatura, más bien alto y esbelto, de ojos claros de luz, tez pálida y semblante tranquilo. Su porte era majestuoso, y en los momentos más difíciles, demostró siempre su valeroso corazón y su arrogancia de raza. Fue bravo en las batallas, y aunque herido su cuerpo, como en la batalla de Loja, siempre conservó su dignidad de rey, su dignidad de raza y su dignidad de hombre de corazón, a pesar de tantas y tantas amarguras como tuvo que sufrir constantemente su espíritu y su voluntad.

La tradición en cambio le ha conferido un aspecto moreno de piel y pelo.