La desaparición del niño de Somosierra ¿Alguien recuerda este hecho?
un gran misterio ocurrido hace unos 25 años atrás en la sierra de Madrid, en una localidad llamada Somosierra.
Los hechos nos relatan un terrible accidente que ocurrió en la carretera con un camión cisterna que trasladaba un potente ácido, y que al parecer se desplazaba a excesiva velocidad en un terreno de montaña, tal como lo revela la “caja negra” del vehículo.
El ácido que se derramó en los alrededores producto del accidente puso en peligro la integridad natural de la zona por mucho tiempo, pero durante el choque mató al chofer y a su esposa, quien lo acompañó desde el inicio del viaje. Ellos quedaron con el rostro irreconocible debido a la sustancia que se derramó también sobre ellos a través de una brecha en la cabina originada por el accidente.
Cuando llegó la policía y todos los que debían hacerse cargo del hecho, se enteraron por el padre de la difunta, que junto a ellos también viajaba su menor hijo, sin embargo, no habían rastros de él.
Lo primero que se pensó fue que el fuerte ácido pudo haber disuelto su cuerpo, pero todo ello quedó luego descartado por los especialistas en el tema, quienes dijeron que siempre debieron quedar restos óseos, y que aún cuando el cuerpo se hubiera sumergido en una bañera con esta sustancia, quedarían rastros.
Se buscó por toda la zona y no se hallaron sus restos, sin embargo, las investigaciones hechas por los especialistas sobre la “caja negra” revelaron que el camión se había detenido ese día alrededor de doce veces sin razón aparente, además, se percataron que delante del camión que viajaba a alta velocidad había una furgoneta blanca que parecía huir de ellos. Eso hizo suponer que tal vez iban tras su hijo secuestrado en ella.
Pero esto perdió sentido cuando algunos testigos que vieron el accidente revelaron que habían visto descender de una furgoneta blanca a un par de hombres muy pálidos y vestidos completamente con batas blancas, para luego acercarse al camión siniestrado y recoger un gran bulto.
Hasta la fecha se ha hablado de secuestros alienígenas, de combustión interna del pequeño, de espíritus y demonios en la zona, y de decenas de conjeturas más, pero lo cierto es que nunca más se supo el destino del pequeño niño. Todo un misterio realmente.
un gran misterio ocurrido hace unos 25 años atrás en la sierra de Madrid, en una localidad llamada Somosierra.
Los hechos nos relatan un terrible accidente que ocurrió en la carretera con un camión cisterna que trasladaba un potente ácido, y que al parecer se desplazaba a excesiva velocidad en un terreno de montaña, tal como lo revela la “caja negra” del vehículo.
El ácido que se derramó en los alrededores producto del accidente puso en peligro la integridad natural de la zona por mucho tiempo, pero durante el choque mató al chofer y a su esposa, quien lo acompañó desde el inicio del viaje. Ellos quedaron con el rostro irreconocible debido a la sustancia que se derramó también sobre ellos a través de una brecha en la cabina originada por el accidente.
Cuando llegó la policía y todos los que debían hacerse cargo del hecho, se enteraron por el padre de la difunta, que junto a ellos también viajaba su menor hijo, sin embargo, no habían rastros de él.
Lo primero que se pensó fue que el fuerte ácido pudo haber disuelto su cuerpo, pero todo ello quedó luego descartado por los especialistas en el tema, quienes dijeron que siempre debieron quedar restos óseos, y que aún cuando el cuerpo se hubiera sumergido en una bañera con esta sustancia, quedarían rastros.
Se buscó por toda la zona y no se hallaron sus restos, sin embargo, las investigaciones hechas por los especialistas sobre la “caja negra” revelaron que el camión se había detenido ese día alrededor de doce veces sin razón aparente, además, se percataron que delante del camión que viajaba a alta velocidad había una furgoneta blanca que parecía huir de ellos. Eso hizo suponer que tal vez iban tras su hijo secuestrado en ella.
Pero esto perdió sentido cuando algunos testigos que vieron el accidente revelaron que habían visto descender de una furgoneta blanca a un par de hombres muy pálidos y vestidos completamente con batas blancas, para luego acercarse al camión siniestrado y recoger un gran bulto.
Hasta la fecha se ha hablado de secuestros alienígenas, de combustión interna del pequeño, de espíritus y demonios en la zona, y de decenas de conjeturas más, pero lo cierto es que nunca más se supo el destino del pequeño niño. Todo un misterio realmente.