Ya hace casi tres semanas que empezó el Otoño en la Puebla el tiempo ha refrescado bastante, sus gentes se encuentran mas encerradas en sus hogares y por los tejados se ve salir el humo blanco de algunas chimeneas, pues las estufas ya comienzan a calentar el ambiente de el hogar, las calles se ven solitarias después que los muchachos han entrado en el colegio, solo alguna persona que va a la visita del medico y en este tiempo algunos que tienen que salir a los campos a recoger la almendra. Todo es tranquilidad, todo es paz, todo es silencio, una brisa que viene de “ El Calar “ con olor a romero, a pino, a tomillo y a otra plantas silvestres se siente y se respira. Desde este foro un abrazo a todos los que podéis percibir ese trocito de paraíso.