Hola Alejandro
Gracias por animarme a que no deje nunca de expresar la palabra, pues te diré que casi he vivido de ella casi toda mi vida, mi comunicación con miles de familias de diferentes ideologías y etnias me han convertido en un gran conversador.
Pienso de la poesía mas o menos como tu, solo que tu la sientes muy profunda y yo quizá no tanto.
Si, la palabra puede ser una arma muy potente y peligrosa, pero mas que una arma (Porque esa frase suena un poco fuerte) puede ser un lazo que de unión entre los pueblos y sus gentes.
Desde luego que implica mucho peligro, La muestra la tienes en lo que tu comentas del joven de Jerusalen. fijate la que nos armo (Creo que ni el se lo hubiese imaginado) detrás de esas palabra de paz y de amor, nació la gran potencia del cristianismo, acompañada de la cantidad de sectas, que entre unos y otros con sus buenas palabras tienen dominado al mundo entero y todo ese imperio a nivel mundial lo han conseguido con el arma de la palabra, es una pena que sea tan peligrosa
porque a veces es usada por personas para aprovecharse de otras.
Los intelectuales siempre hemos sido perseguidos por decir la verdad y creo que ahora la cosa no esta para que se llegue a esos extremos.
Gracias por animarme a que no deje nunca de expresar la palabra, pues te diré que casi he vivido de ella casi toda mi vida, mi comunicación con miles de familias de diferentes ideologías y etnias me han convertido en un gran conversador.
Pienso de la poesía mas o menos como tu, solo que tu la sientes muy profunda y yo quizá no tanto.
Si, la palabra puede ser una arma muy potente y peligrosa, pero mas que una arma (Porque esa frase suena un poco fuerte) puede ser un lazo que de unión entre los pueblos y sus gentes.
Desde luego que implica mucho peligro, La muestra la tienes en lo que tu comentas del joven de Jerusalen. fijate la que nos armo (Creo que ni el se lo hubiese imaginado) detrás de esas palabra de paz y de amor, nació la gran potencia del cristianismo, acompañada de la cantidad de sectas, que entre unos y otros con sus buenas palabras tienen dominado al mundo entero y todo ese imperio a nivel mundial lo han conseguido con el arma de la palabra, es una pena que sea tan peligrosa
porque a veces es usada por personas para aprovecharse de otras.
Los intelectuales siempre hemos sido perseguidos por decir la verdad y creo que ahora la cosa no esta para que se llegue a esos extremos.
