Hola Rosa ¡
no en la
cueva no había nadie, ya estaba en muy mal estado.
La suerte es que ha sido muy temprano, y no ha cogido a Magdalena ni a su nieta por allí.
El sabado pasado como hizo tan buen día, celebrarón la
comunión de s u nieta en la
puerta, como se hacái antes.
Lo de mi madre... se ha llevado un buen sobresalto, pero ella pensaba que el estruendo era consecuencia de un fuerte trueno.