Recordar aquellos tiempos y contarselo a nuestros hijos.
Las raices no pueden olvidarse ni perderse. A can que lame ceniza, no le debes confiar la harina. bueno me retiro pues viene mi hijo y va ha hacer algo en el ordenador un abrazo hata luego y además traia a todos los tios locos, yo siempre le contaba los pretendientes, es verdad, Lola lo recuerdas? gracias enrique yo tambien me acuerdo de vosotros de todos. hasta de tu tia eloisa