¿tienes un negocio?

PURULLENA: Los reflejos nocturnos, los olores,...

Los reflejos nocturnos, los olores,

las últimas esquinas. Me mirabas.

Arrastraba el deseo

aquel lento verano de la costa.

Se nos pasó la noche en recorrer

el paisaje feraz de nuestros ojos.

Ya nunca más volvimos

a asistir al milagro.