ERE-SEVILLANAS SOCIALISTAS
(cántese con música de “Iba yo de peregrina”, de María de Almonte)
Yo no he trabajao en mi vida
y ya estoy prejubilao.
Y ya estoy prejubilao
yo no he trabajao en vida
y ya estoy prejubilao,
soy del PSOE de Sevilla
y mi hermana y mi cuñao.
Y mi hermana y mi cuñao,
mi suegra, mi tío Manolo
y mi primo el “Colorao”,
y nos llevamos los euros
bastante más que “doblaos”.
Cuéntame, me dijiste cuéntame,
cuenta los dineros Paco.
¡Porque yo abasto no doy,
nunca he visto tanto “taco”!
Mi primo el del sindicato
me dijo que era un negocio.
Me dijo que era un negocio,
mi primo el del sindicato
me dijo que era un negocio,
que el asunto de los ERE
ERA más que sustancioso.
Era más que sustancioso
y que no me preocupara
que eso no era de mafioso
sino de ser un tío listo
y bastante habilidoso.
Méteme, yo le dije méteme,
méteme dije a mi primo.
¡Porque ya dice el refrán,
“a mi primo yo me arrimo”!
Nos buscamos una empresa
Que tuviera “relación”.
Que tuviera relación,
nos buscamos una empresa
que tuviera “relación”
y que estuviera “bien vista”
para la Administración.
Para la Administración,
nos metieron en plantilla
con el resto de currantes
y nadie dijo ni pío
ni le pareció chocante.
Mírame, yo te dije mírame,
mírame cariño mío.
¡Más dinero que un marqués,
tiene ahora tu marío!
Todo iba de maravilla
pero a un tonto lo trincaron.
Pero a un tonto lo trincaron,
todo iba de maravilla
pero a un tonto lo trincaron
y fue allí en Mercasevilla
donde al tonto lo grabaron.
Donde al tonto lo grabaron
pidiendo unas comisiones
a un empresario honrado
y eso arrastró a los EREs
y se descubrió el tinglado.
Fíjate, yo te digo fíjate,
fíjate cariño mío.
¡Es posible que al “marqués”,
se lo lleven detenío!
(cántese con música de “Iba yo de peregrina”, de María de Almonte)
Yo no he trabajao en mi vida
y ya estoy prejubilao.
Y ya estoy prejubilao
yo no he trabajao en vida
y ya estoy prejubilao,
soy del PSOE de Sevilla
y mi hermana y mi cuñao.
Y mi hermana y mi cuñao,
mi suegra, mi tío Manolo
y mi primo el “Colorao”,
y nos llevamos los euros
bastante más que “doblaos”.
Cuéntame, me dijiste cuéntame,
cuenta los dineros Paco.
¡Porque yo abasto no doy,
nunca he visto tanto “taco”!
Mi primo el del sindicato
me dijo que era un negocio.
Me dijo que era un negocio,
mi primo el del sindicato
me dijo que era un negocio,
que el asunto de los ERE
ERA más que sustancioso.
Era más que sustancioso
y que no me preocupara
que eso no era de mafioso
sino de ser un tío listo
y bastante habilidoso.
Méteme, yo le dije méteme,
méteme dije a mi primo.
¡Porque ya dice el refrán,
“a mi primo yo me arrimo”!
Nos buscamos una empresa
Que tuviera “relación”.
Que tuviera relación,
nos buscamos una empresa
que tuviera “relación”
y que estuviera “bien vista”
para la Administración.
Para la Administración,
nos metieron en plantilla
con el resto de currantes
y nadie dijo ni pío
ni le pareció chocante.
Mírame, yo te dije mírame,
mírame cariño mío.
¡Más dinero que un marqués,
tiene ahora tu marío!
Todo iba de maravilla
pero a un tonto lo trincaron.
Pero a un tonto lo trincaron,
todo iba de maravilla
pero a un tonto lo trincaron
y fue allí en Mercasevilla
donde al tonto lo grabaron.
Donde al tonto lo grabaron
pidiendo unas comisiones
a un empresario honrado
y eso arrastró a los EREs
y se descubrió el tinglado.
Fíjate, yo te digo fíjate,
fíjate cariño mío.
¡Es posible que al “marqués”,
se lo lleven detenío!