A MIS PADRES, A MIS MAESTROS Y EDUCADORES: En cierta ocasión abrí un libro y de puño y letra suya decia lo siguiente: "Soy feliz, he perdido el sentido del olfato". A D. Gregorioó Salas Rodriguez y al autor de esta leyenda D. Fernando Gomez Gallardo; mis catedraticos y educadores; quiero render homenaje de respeto y de cariño por cuanto me educadoron y me enseñaron. ¿Y Como no a mi madre y a mi padre, que con menos conocimientos me enseñaron a conducirme en la universidad de la vida, y en ellos a todos cuantos educan y enseñan de generación en generación.