Hola Francisco, perdona mi tardanza en constestarte pero he vuelto de vacaciones y no he tenido contacto. Según los datos que me aportaras se trata de Pepe el Electricitas, sus padres, como dices, vivian en la calle Llana, hoy Reyes Católicos, y efectivamente su casa comunicaba por el corral con el Cementerio Viejo, se llamaba José Moya Gaspe y ya falleció. En Salar viven un hijo suyo, también electricista, su esposa hija del caminero, también falleció. También te diré que estoy recopilando la historia de la Guerra Civil en Salar y me he encontrado en la documentación que trato informes que su padre realizaba sobre algún vecino como comandante de puesto de la Guardia Civil, lo que no sé si sustituiría al sargento Manuel Pérez Vázquez, que fue inculpado por malversación de fondos públicos en la causa 77Bis. Esta causa se inició en el año 1940. Y también estoy tratando de localizar una foto del citado Sargento. Espero que mi información te haya sido de ayuda. Un saludo José Montero Corpas
Gracias, Sr. José, por su información sobre mi tema "Pepillo"... Lamento que haya fallecido y que, por tal motivo, mis deseos de contactar con él ya no sean posibles del modo como esperaba poderlo hacer. Tengo la seguridad de que él se hubiera alegrado de nuestro reencuentro. Pero, como es cierto que los amigos, si lo son, nunca se pierden, me queda el recurso de creer que nuestro reencuentro se ha producido... desde esa dimensión. ¡Que descanse en Paz! Respecto al tema de la Guardia Civil del Salar, en el año que Vd. cita (1940), yo tenía 7 años y mi memoria de entonces no recuerda nada de lo que Vd. dice del tal Sargento Manuel Pérez Vázqquez; lo que sí recuerdo es que, durante años, mi padre era el Comandante de Puesto. A mi madre, también ya fallecida, nunca le oí mencionar la existencia de dicho sargento (lo cual no quiere decir que hubiera sido ciertamente el Cte. de Puesto predecesor a mi padre). Pocas fotos conservamos de aquél entonces, pero si en alguna de ellas apareciera el sargento M. P. V., tenga la seguridad de que se la facilitaré. Espero poder seguir en contacto con Vd., ya que, mientras viva, el Salar y sus cosas me siguen interesando. Repito. gracias por todo. Saludos.
Hola de nuevo Francisco, repasando las causas y las declaraciones en mi trabajo, en la Causa 149/39 sobre Francisco Plaza Morales (a) Sacristán, afirma en su declaración "que mandó a su señora al cuartel de la guardia civil de Salar a buscar a una amiga de su esposa que se llamaba Lucrecia, que era esposa del guardia civil Palmero y que la estuvo escondida en su casa junto a sus hijos hasta que entraron las fuerzas nacionales". Por esta declaración, supongo que su padre era uno de los cuatro guardias civiles que había en el cuartel con el Cabo y que debieron salir el día 24 de Julio del 36, según declaran unos, y el 27 de este mes, segun el Cabo, antes de que vinieran los milicianos de Loja, que ya habían asaltado el cuartel de la guardia civil de Loja. No se si de esto te habrán hablando tus padres. Posteriormente creo que su padre sería destinado a Loja, ya que me aparece en otra de las causas como el guardia que tomo declaración en la presentación procedentes del bando rojo de otros paisanos de Salar. No se si tiene Vd. conocimiento de lo que le informo. Un saludo. José Montero
Parte de lo que me dices, José, respecto a mi padre en su primera estancia en Salar, responde a lo que yo ya sabía. Es cierto que mi madre, mi hermano mayor y yo, fuimos acogidos por una familia, cuando mi padre recibió orden de abandonar el Cuartel antes de que llegaran a Salar los milicianos... Que mi padre, posteriormente, estuviera en Loja, lo ignoro. Lo que sí sé es que, antes de volver de nuevo a Salar, procedía del frente de Toledo. En mi mente de niño con cuatro años aproximadamente, quedó muy marcada la escena que presencié en la que mi madre fue requerida para que saliera a la puerta de la casa en la estábamos acogidos, pues un jefe miliciano quería saber dónde estaba mi padre. Mi madre, supongo que muy asustada, nos cogió de la mano a mi hermano y a mí, y salimos a la puerta. Lo que mi madre le dijo al miliciano, no lo recuerdo; lo que sí recuerdo es la escena, y que ni a nosotros tres, ni a la familia que nos protegía, nos pasó nada malo. Posteriormente a la guerra, nosotros mantuvimos una relación muy familiar con quienes nos acogieron durante la misma. Dicha familia era nombrada por nosotros por su apellido (que, desgraciadamente, ahora no recuerdo). La casa estaba en la actual calle Inmaculada, haciendo esquina con la calle en la que estaba (y que creo sigue estando) el Cuartel de la G. C., pero del lado izquierdo según se baja la calle Inmaculada. En esa misma calle, y por debajo de la casa que nos acogió, vivía la chica que de siempre estuvo ayudando a mi madre Lucrecia (su padre, mi abuelo, era maestro nacional de Salar cuando ella nació en 1910; se llamaba D. Marciano García Chamorro). La chica en cuestión, nos acompañó por todos los sitios en los que fuimos acompañando a mi padre hasta que, por diversas razones de su conveniencia, quedó en Granada con un hermano de mi madre, llamado Manuel García Cruces. Ella se llama Caridad Pinilla Lara. Caridad es ya octogenaria, y sigue en Granada compartiendo sus días con una hija de mi ya difunto tío Manolo. En fin, José, que si sigo actualizando lo que me quedó de aquél pasado, tendría tema para aburrite o, en el mejor de los casos, para rellenar algún hueco de tus espacios sobre la historia de Salar. De todos modos, permite que te pida intentes llenar tu el hueco que queda en mi memoria, sobre el apellido o el apodo con el que se conocía en Salar a la familia que nos acogió durante la guerra civil, ¿será posible? Gracia por todo. Saludos. Fco. Palmero García.