ABC, tú no podrías entenderme nunca por mucho que te lo propusieras. Ni siquiera sabrías comprender mi idea por mucho que te la repitiera. Crees que engañas, y tu torpeza te traiciona siempre. Pero hasta estoy seguro que eres un buen chaval. Pero demasiado básico para entender lo que opino. Ahora vete a hablar de oposición, anda.
Kiko.
Kiko.