Hace unos días se cumplieron 32 años de la gran manifestación que se produjo en la ciudad de Málaga por la autonomía andaluza. Tal y como recordó Kiko, a consecuencia del intento de colocar una bandera andaluza en la fachada de la Diputación, murió de un disparo anónimo un joven sindicalista llamado Caparrós. De él ya hemos hablado en alguna ocasión. Pero hoy yo lo saco, nuevamente, a colación porque en una placa que lo recuerda en esta ciudad de Málaga, han aparecido unas pintadas fascistas con la siguiente frase: ROJOS NO, CAPARROS JODETE.
Triste, es muy triste, que no teniendo bastante con que lo mataron y su crimen no fue ni investigado y continúa impune su asesino; todavía aún su memoria la sigan ultrajando unos personajillos que no son nada, ni lo han sido y que su único poder lo ostentan con una pistola en la mano o escondidos en el anonimato.
E. G.
Triste, es muy triste, que no teniendo bastante con que lo mataron y su crimen no fue ni investigado y continúa impune su asesino; todavía aún su memoria la sigan ultrajando unos personajillos que no son nada, ni lo han sido y que su único poder lo ostentan con una pistola en la mano o escondidos en el anonimato.
E. G.