Don Marco y Don Pepe, dos amigos de la tercera edad, se veían en el parque todos los días para alimentar
a las palomas, observar las ardillas y discutir los problemas del mundo.
Un día Marco no llegó.
Sam no se preocupó mucho pensando que quizá tuvo un resfrío o algo parecido.
Pero después de una semana que Marco no venía, Pepe realmente se preocupó.
Sin embargo, siempre se juntaban solo en el parque y Pepe no sabía dónde vivía Marco,
por lo que no podía averiguar qué le había pasado.
Pasado un mes, Pepe fué al parque
y sorpresa, ahí estaba Marco!
Pepe estaba muy excitado y alegre de verlo y le dijo:
-Por lo que mas quieras Marco, dime qué te pasó
Marco le contestó, "He estado en la cárcel"
- ¿En la cárcel? - replicó Pepe. - ¿qué te pasó?
'Bueno, dijo Marco, ¿conoces a Lupita, la linda mesera morena y nalgona de la cafetería donde voy seguido?
-Claro, -dijo Pepe- Yo la recuerdo. ¿Qué pasa con ella?
'Bueno, un día me demandó por violación.
A mis 87 años, yo estaba tan orgulloso que, cuando fui al juzgado,
me declaré culpable....
Y el maldito Juez me sentenció a 30 días de cárcel por mentiroso
a las palomas, observar las ardillas y discutir los problemas del mundo.
Un día Marco no llegó.
Sam no se preocupó mucho pensando que quizá tuvo un resfrío o algo parecido.
Pero después de una semana que Marco no venía, Pepe realmente se preocupó.
Sin embargo, siempre se juntaban solo en el parque y Pepe no sabía dónde vivía Marco,
por lo que no podía averiguar qué le había pasado.
Pasado un mes, Pepe fué al parque
y sorpresa, ahí estaba Marco!
Pepe estaba muy excitado y alegre de verlo y le dijo:
-Por lo que mas quieras Marco, dime qué te pasó
Marco le contestó, "He estado en la cárcel"
- ¿En la cárcel? - replicó Pepe. - ¿qué te pasó?
'Bueno, dijo Marco, ¿conoces a Lupita, la linda mesera morena y nalgona de la cafetería donde voy seguido?
-Claro, -dijo Pepe- Yo la recuerdo. ¿Qué pasa con ella?
'Bueno, un día me demandó por violación.
A mis 87 años, yo estaba tan orgulloso que, cuando fui al juzgado,
me declaré culpable....
Y el maldito Juez me sentenció a 30 días de cárcel por mentiroso