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Procesión calle Aratmontarir al fondo el molinillo, ZUJAR

MAL CORAZóN
Al oscurecer en la rambla del Molinillo
Una bandada de temblorosos gorriones
Se disipa por el aire, huyen de malhechores,
Buscando, acaso un lugar desconocido.
Detrás, no muy lejos, les siguen unos cazadores
Escopetas al hombro, enfado y firme deseo
Vienen de la soledad, siguiendo el vuelo.
De la tarde nació la casta luna,
Alumbrando la rauda rambla
Linternas enfocan al olvidado e inocente,
Plomada a traición y certera, cae ave asesinada.
Una mala corazonada compendiada...
UN DIA CUALQUIERA:
Con mis paseos cortos, entre el puente y casa, voy parándome como el que bebe el vino añejo a pequeños tragos. Observo lo cambiado del barrio, se mantiene casi igual desde el Puente hasta el Chorreor de Quico.
La Rambla ciega por las zarzamoras y otros espinos va rompiendo su paso por las brozas en su camino. Agua que baja limpia desde las alturas, porqué no respetáis mi llanto, porqué no depuráis vuestras agua fecales y saneáis mi paso. Todo es pisoteado y mezclado. Nadie...
En la noche oscura de zújar

Crece el miedo de la soledad,

Destroza el sueño profundo

Dios olvida la dulce jíc

Mis sentidos buscan una espurna

Que alegre y prenda el corazón.

¡Que penoso y salado es el llanto

Cuando la tristeza se instala en las venas!

Se apaga la luciérnaga del pensamiento,

El ser humano vuelve a su infancia,

La apatía crece como una sombra fría.

La tierra, de pronto, recobra su realidad
Esperando a la mañana, la luz solar.Al.
La idea fué buena (lo digo por la foto) pero en el pueblo , ahora todo se ve turbio. Si haces fotos nocturnas , pon tu máquina en un ""tres-piés"" y así poder corregir tu ignorancia en ese arte.
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Oda al caño jorge
Cuando la brisa del huerto se cuela por mi ventana. Como cuando, mi amada con manos de seda, toca mi cara.
Me despierto risueño, me asomo a la calle, miro el huerto, la rambla y el cielo. Llega a mi pensamiento todo un mundo feliz con sus rayos tersos y cálidos. Dislumbrando mis ojos dormidos. Mi corazón latiendo en pesares. Déjame que te cante yo también algo por soleares, con el bamboleo de los chopos y olmos de la rambla, pude contemplar desde el balcón de casa. Desde.