Los primeros orígenes conocidos de la villa a través de las
fuentes históricas, se remontan a la dominación árabe, aunque ha aparecido abundante material arqueológico ibérico y fenicio en sus alrededores. De 1268 es la Carta de Daslinde y Amojonamiento autorizada por el monarca Alfonso X, pasando luego a depender del linaje de la
Casa de los Medina-Sidonia, quienes realizaron un intenso proceso repoblador en la zona. Una
torre vigía es precisamente, junto a remos marineros, las figuras principales del
escudo municipal, que recuerdan sus orígenes a la
sombra del vigilante
torreón y su estrecha vinculación marítima (Antequera Luengo, Juan José: 'Símbolos municipales de
Aljaraque (
Huelva. Vexilología. Sigilografía. Heráldica';
Sevilla, Facediciones, 2008). Aljaraque se repuebla a finales del siglo XV por orden del Señor de
Niebla,
San Bartolomé de la Torre, Villanueva de los Castillejos, Huelva, Ayamonte y algunos portugueses. La razón del posterior abandono del
pueblo habría que buscarla en la pobreza de los moradores. Son personas que cultivaban para
comer, y no para comerciar; de ahí que no obtuviesen beneficios con los que pagar el impuesto del
pan terciado al Señor del pueblo. Durante la guerra con
Portugal (siglos XVI-XVII) Aljaraque es asolado por ataques portugueses, y abundan las epidemias de peste y cólera. A finales del siglo XVII nuevas gentes pueblan Aljaraque, procedentes de aldeas entre este pueblo y
Cartaya. Posteriormente, bien entrado el siglo XVIII, vendrán gentes de
Gibraleón, Cartaya y Portugal. Con la llegada de los ingleses y la explotación minera de
Corrales a finales del siglo XIX, Aljaraque conseguirá un fuerte crecimiento demográfico. Sin embargo, con la instalación del polo industrial de Huelva en la segunda mitad de nuestro siglo XX, muchos habitantes de Aljaraque emigraron a la ciudad y otros muchos, busca de una mejora económica, al extranjero; principalmente a Holanda y
Alemania. El libro Expedientes carcelarios de Aljaraque (Huelva). Prisión Provincial, 1936-1939, de Juan José Antequera y Juan José Luengo, da cuenta de cuantos vecinos sufrieron prisión durante aquellos años.
ALJARAQUE: v. con ayunt. en la prov., part. jud., adm. de rent. y distr. marít. de Huelva (1 hora), aud. terr., c. g. y dióc. de Sevilla (16): SIT. en una altura de dilatada superficie, combatida por todos los vientos, principalmente por los del S., padeciéndose algunas fiebres intermitentes: tiene 67
CASAS de 4 varas de altura por lo regular y de buena distribución interior, en una
calle cómoda, limpia y bien empedrada; cárcel casi arruinada, pósito, igl. parr. de entrada, con
cementerio en ella, dedicada a Ntra. Sra. de los Remedios y servida por un cura cuya provisión es de concurso general. Confina el TÉRM. con Gibraleon y Cartaya, entendiéndose por E. y S. 1/2 hora, por O. una y por N. 1/4: en él se encuentran, como a 80 pasos de la pobl., la
ermita de San Sebastián, en la que se dice misa, á cargo del ayunt.; dos fuentes de buenas y abundantes
aguas de que se surten los hab. para sus usos domésticos y para los
ganados, y no lejos existe un
molino harinero impulsado por las aguas del r. Odiel que marcha de N. a S. a desaguar en el Océano, en el cual, que es de curso perenne y bastante caudaloso, hay una
barca de paso y abunda el
pescado lisar: el TERRENO es tenaz, flojo, alguna parte de regadío y se divide en 90 suertes, de las que se cultivan 400 fan. de primera clase, 300 de segunda y 450 de tercera: hay además 7
huertos pequeños y de 20 a 25,000 pies de arbolado
pinar: las labores se hacen con 100 yuntas y 10 cangas: pasan por el térm. dos
CAMINOS carreteros, uno en dirección a Cartaya, otro a Gibraleon y los demás son de herradura: la CORRESPONDENCIA se recibe en días indeterminados; PROD.: trigo, cebada, avena,
aceitunas,
frutas, legumbres y toda clase de semillas en cantidad suficiente para el consumo: existe cría de
ganado lanar, cabrío y
vacuno, y abunda la
caza menor, lobos y zorras. POBL.: 87 vec.: 395 habit. dedicados a la
agricultura, importación de aceite de Gibraleon, vino de Palos y géneros de vestir de Huelva y Cartaya: CAP. PROD.: 1.646,754 rs.: IMP.. 70,724 rs.: CONTR.: 6,175 rs. 33 mrs. El PRESUPUESTO MUNICIPAL que asciende a 4,500 rs., se cubre con los prod. de propios consistentes en 2,000 fan. de tierra de labor, arbolado y pasto. Aunque se ignora la primera fundación de esta v., se infiere de una carta de deslinde y amojonamiento autorizado por D. Alfonso el Sabio, que se llamaba Aljafar en el año 1268: a principios del siglo XVI, mandó poblarla su señor el duque de Medina Sidonia, sobre las
ruinas de una ant. alq. árabe llamada Aljaraque: no se ha fomentado por ser su terreno corto y poco productivo; pero en el día se nota va en aumento, en razón al desarrollo de su agricultura y plantíos de naranjal é higueral: en 1804 se perdieron todos los sembrados, pero el señor del pueblo suministró granos para comer y sembrar.
* Diccionario Geográfico Estadístico Histórico de
España. Pascual Madoz, 1850.