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ALOSNO: Ausente que me voy pá la feria, aquí el agua no importa,...

Ausente que me voy pá la feria, aquí el agua no importa, ¿como dudas de si se de donde es Parera? y Manzanares Junior, Talavante, y otros, ya con hoy dos corridas suspendidas, hoy si toreaba el de la Puebla, el de esa Puebla torera, donde los centauros, ayer el de Salteras y el de la cantaora, mi amigo Zabala lo calificaba de estafa en su crónica de A. B. C. yo el día antes lo califiqué de relleno, que Liria también se gano el sueldo, Ponce en Sevilla no cuaja.
Pero bendita sea el agua que falta hace, o al menos eso dicen los políticos, pues en Malaga han tenido que abrir las compuertas a un pantano.

Porque cuando sobre el pecho inclinas
la melancólica frete,
una azucena tronchada me pareces.

Porque al darte la pureza
de que es símbolo celeste,
como a ella te hizo Dios
de oro y de nieve.

Que sobre la falta tenía
el libro abierto,
en mi mejilla tocaban sus rizos negros.

Que si paisano, que sigue existiendo la suerte de varas,
y los hombres de plata, se lucen en la Maestranza, colores que predomina rosa palo y plata,
y color muy torero el azabache,
ya ves si es torero que nuestro Betis lo lleva puesto en las calzonas, pues que de acuerdo estarás con que es un río torero, muy torero y respetuoso pues que silencio sabe guardar como público entendido, esos silencios que llegan al alma, el que se guardó para él de la Puebla de Prior, que por ese se que camelas tu.
No me nombres la calle del infierno, que los recuerdos son malos, ¡Ay! los que yo tengo, pues a pesar de los ruidos.
Yo solo se que oía
solo su aliento,
que apresurado escapaba del labio seco.
Solo se que ella se volvio,
ella y yo los dos a un tiempo,
y nuestros ojos se hallaron
y sonó un beso.
¡Ay! como quieres que me olvide
de la calle del Infierno,
montado en tu caballitos,
que aunque eran de cartón,
¡Yo me sentí como Cañero!

Un abrazo para ti y para todos/as.
Aquí en este saludo Ausente pondría un asterisco.
Uno solamente.
Y Como Halcón de la Serranía, voy a visitar el Murtigas, allí descansar y dejar la pena mía, pues todo esa sierra lo convierte en alegría.