El Real de la
Feria de
San Lucas se ha caracterizado desde donde me alcanza la memoria, (pues yo viví allí desde los tres a los diez años y desde los quince a los veinte, sin dejar de ir a visitar a mi
familia aunque a la feria no le he sido fiel en muchos años), por los puestos de "peros" y
castañas que traían desde la
sierra de
Huelva, por los puestos de juguetes, como este, por los de
artesanía en
cerámica y bronce, que echo de menos pues no he visto ninguno y por la feria de
ganado, que tampoco he visto en esta rápida visita de este año.