Los orígenes: fundación,
tradición y realidad: El
monasterio se eleva sobre un alcor, que domina la confluencia de los
ríos Tinto y Odiel, conocido desde antiguo como Peña de Saturno. Sobre los orígenes del nombre de
la Rábida existen leyendas recogidas en un antiguo códice de fray Felipe de Santiago. Según estas leyendas, en tiempos de los fenicios habría existido un
altar dedicado a su dios Baal (posteriormente equiparado con Hércules) y más tarde los
romanos habrían elegido este mismo lugar para venerar a su diosa Proserpina. Los árabes levantarían aquí un pequeño morabito con monjes-caballeros similares a los de las órdenes cristianas. Este tipo de morabito musulmán solía estar en la costa fronteriza y tomaba el nombre de rábida o rápita (del árabe رباط ribat), de donde le vendría la denominación. En algunos países musulmanes, un morabito es una persona considerada especialmente pía a la que popularmente se atribuye cierta santidad. La misma palabra designa, por extensión, bien el lugar donde vive un morabito, situado en despoblado, o la tumba de un personaje de estas características, que es objeto de veneración popular. Proserpina es una antigua diosa cuya
historia es la base de un mito de la
primavera. Es la equivalente en la mitología
romana a la diosa griega Perséfone. Proserpina fue subsumida por el culto de Libera, una antigua diosa de la fertilidad, esposa de Liber. Es una deidad de vida, muerte y resurrección. Baal es una antigua divinidad de varios
pueblos situados en Asia Menor y su área de influencia: babilonios, caldeos, cartagineses, fenicios, filisteos, israelitas y sidonios. Era el dios de la
lluvia, el trueno y la fertilidad.