Se desconoce la fecha exacta en que fue tallada, el autor y el momento en que llegó la imagen al
monasterio, si bien los estudios estilísticos realizados a la efigie la sitúan a finales del siglo XIII o comienzos del XIV. La bula pontificia "Etsi cunctorum" de 6 de diciembre de 1412, de Benedicto XIII, ya habla de dicha advocación como patrona del monasterio, lo que la sitúa con anterioridad en este lugar, puesto que la citada bula viene a confirmar la vida monástica que ya existía en dicho eremitorio. Por otro lado, al igual que ocurre con otras muchas imágenes de la zona y de la época, está rodeada de varias leyendas, fábulas y
tradiciones, todas ellas, en su mayoría, carentes de realidad histórica o fundamento científico. La mayoría están recogidas en el códice de 1714 de Fr. Felipe de Santiago, donde se encuentran tanto las tradiciones y leyendas de la zona y la época, como datos históricos documentados.-Tradiciones y leyendas-Entre las leyendas que rodean a esta imagen, las más destacadas son:- El supuesto origen apostólico de la imagen. Trata de la traída de la imagen, desde Tierra
Santa a Palos, y que dicha talla sería obra del evangelista
San Lucas.