Niebla fue reconquistada por Alfonso X el Sabio y las tropas cristianas. La ciudad todavía sufrió daños en otras guerras, como la Guerra de la Independencia en el siglo XIX, con el asedio de las tropas francesas. Como podemos ver, aunque hoy en día no se encuentra entre los lugares más turísticos, sí fue un punto de vital importancia para la conquista del territorio, probablemente por su posición estratégica sobre una colina dominando los alrededores. Niebla es una población pequeña que se puede ver en un día. No obstante, tenemos muchos
monumentos y bastante
historia por conocer. Además, hay que salir del centro para ver algunas cosas interesantes en los alrededores, como puede ser el
puente romano o los dólmenes prehistóricos. Sea como sea, la visita a Niebla merece la pena. Esta antigua
iglesia fue construida sobre la zona en donde se encontraba la mezquita, como suele ser habitual en las ciudades andaluzas con la reconquista de los territorios de Al-Andalus. El
edificio que ha llegado a nuestros días es una interesante mezcla de construcciones y culturas. Hay restos de la antigua mezquita que fue casi derrumbada por completo,
columnas de la época
romana y
puertas y
ventanas en forma de herradura por lo que ha sido calificada como una obra de estilo mudéjar. Fue declarada
Monumento histórico y se encuentra en la
Plaza de
Santa María, junto al
Ayuntamiento de Niebla.