Tras la conquista de la isla de
Santo Domingo en 1795 por los franceses, se trasladaron a La Habana y, tras la guerra de independencia cubana en 1898, sus restos fueron trasladados a bordo del crucero Conde de Venadito hasta
Cádiz y desde allí hasta
Sevilla por el aviso Giralda con destino a la
Catedral de Sevilla, donde reposan en un suntuoso catafalco. La Habana es la capital de la República de
Cuba, su urbe más grande, el principal
puerto, su centro económico-cultural y su principal polo turístico. Es la ciudad más poblada del país, con una población de 2 106 146 habitantes según datos de 2012, y la tercera más poblada de la región del Caribe. Como capital de Cuba, la ciudad es la sede oficial de los
órganos superiores del Estado y el Gobierno cubano, de todos los organismos centrales y de casi la totalidad de empresas y asociaciones de ámbito nacional. Además, reúne la mayor cantidad de sucursales y
casas matrices de las entidades extranjeras radicadas en Cuba. La Guerra de Independencia de Cuba es el nombre con el que se conoce a la última guerra de independencia cubana frente al Imperio español, además de la última de las llevadas a cabo en el continente americano. El conflicto se inició el 24 de febrero de 1895 en un levantamiento simultáneo de treinta y cinco localidades cubanas, el llamado Grito de Baire, y finalizó en agosto de 1898, tras la entrada de
Estados Unidos en el conflicto y la consiguiente derrota española. Fue denominada en
España como la «Guerra de Cuba» mientras que José Martí la llamó «Guerra Necesaria»El buque Conde de Venadito fue un crucero no protegido, en aquella época clasificado como crucero de 3ª clase, de la Armada Española de la Clase Velasco, que recibió su nombre en honor de Juan Ruiz de Apodaca, político, marino y
militar español, primer Conde de Venadito y último Virrey de Nueva España. El Giralda fue un yate construido para el famoso político, estadista y deportista Hugh McCalmont en 1894. Poco antes del inicio de la guerra hispano-estadounidense fue adquirido por la Armada Española para ser utilizado como aviso, y tras la contienda, fue utilizado como yate real por Alfonso XIII. Un catafalco es un túmulo o plataforma elevada cuidadosamente adornada que se erige en el interior de los templos o lugares donde se celebran exequias solemnes. Los catafalcos tuvieron su época de máximo esplendor durante el Barroco, cuando se convirtieron en auténticas obras de
arte y simbolismo que se elevaban varios metros en el interior de las
iglesias. Cayeron en desuso a lo largo del siglo XX, optándose por plataformas mucho más sencillas que meramente sostienen el ataúd.
.