La Decadencia y El Renacimiento: Tras las expediciones colombinas los Reyes Católicos establecieron en
Sevilla el monopolio del
comercio con las «islas de Indias», Tierra Firme,
Canarias y Berbería, creando la
Casa de Contratación en 1503. Ello implicaba el cierre al tráfico ultramarino de los
puertos de la costa andaluza, que así comenzaron un rápido declive económico. La atracción de las Indias fue tan importante que absorbió la reducida población palerma. Los armadores y marinos más capaces e intrépidos emigraron a América o a Sevilla. Así, a mediados del XVI, la marinera villa de Palos se encontró apenas sin naves. Los pescadores, para seguir ejerciendo su oficio, tuvieron que emigrar y contratarse en los
barcos de las villas vecinas. La población había descendido de forma importante y, sin embargo, la presión fiscal se mantuvo, por lo que cada vecino hubo de pagar más, originándose un círculo vicioso, emigración; presión fiscal que acabó despoblando la villa casi por completo.