Puerto Moral, un pequeño municipio, SÍ, pero de un gran corazón. La humildad, sencillez y generosidad lo hace único y ejemplar. He convivido durante décadas con su gente y tengo un recuerdo de simpatía y agradecimiento que nunca podré compensar.
Cuando por vez primera penetra en su arteria principal,
calle Virgen de la Cabeza sientes que tu espíritu se impregna de algo mágico que te envuelve, que te engancha. ¡Seguro... que volverás!
Un fuerte abrazo. Bernabé,
Correos.