Querido amigo: para tu información he de comuicarte que el sacerdote de Puerto Moral no mató ningún cigüeño, fue fortuito. Quiza lo que si debería de matar con mayor ahínco son las malas lenguas envenenadas que son capaces de levantar infamias tan grandes como las que se dicen. Nuestro párroco desde que llegó lo único que ha hecho ha sido derramar bien por todas partes, pero parece que algunos, al igual que en tiempos de jesús, prefieren vivir en la mentira e hipocresia antes que dar su brazo a torcer. ... (ver texto completo)