Aún de mayor, sigue siendo el dia de mas ilusion, ver bajar easas antorchas por la carrertera abajo, el repicar de campanas, el belen viviente con nuestros hijos en el lugar que ocupamos alguna vez sus padres, esperando en la iglesia la ofrenda de los reyes, el reparto de regalos en la plaza...indescriptible esos sentimientos.