SANTA BARBARA DE CASA: PEDRO, si que conocía al amigo SEVE, pero igual que...

Buenos días amigos de Santa Bárbara.

Escribo este mensaje, sólo por romper el "silencio" que se percibe en el foro.

Se me han ocurrido unas letrillas, como dice Antonio Escudero. Aquí os las dejo.

LIBERTAD Y JUSTICIA

Cuando venimos al mundo,
siempre lo hacemos llorando.
¿Sabemos qué nos espera,
o lo estamos presagiando?

¿Por qué será que al nacer
lo hacemos siempre con llanto?
Nos suspenden por los pies
y nos largan un tortazo.

¡Pues vaya recibimiento!
¿Es que venimos acaso
por nuestro propio deseo?
¿O fuimos los deseados?

Al nacer todos tenemos
nuestros destinos marcados.
¿Dónde está la libertad?
¿O es que nacemos esclavos?

Libertad de decidir
de estar presente en el parto,
o ser espermatozoide
muy lejos de los ovarios.

¿Quién decide estas cuestiones?
Será alguien que no ha pasado
por este valle de lágrimas,
y tampoco va a pasarlo.

Pero ya que hemos nacido,
intentemos hacer algo
para que quien detrás venga
encuentre un valle dorado.

Trabajo nos va ha costar,
mas, tenemos que intentarlo;
con hechos, no con palabras,
que de oírlas ya estoy harto.

Consigamos la igualdad
entre todos los humanos,
con igualdad de derechos,
y deberes igualados.

Que la justicia se imponga,
sin necesitar jurado;
y el alimento no falte
por estar ya devengado.

¡Qué cosas tiene la vida!
Pues, si somos alumbrados
todos de la misma forma,
¿el porqué diferenciarnos?

Empezamos por la cuna.
Una en alto, la otra en bajo;
una con ropa de seda,
otra de lienzo tostado.

Seguimos con los deberes
que tenemos asignados.
Sin trabajar viven unos;
viven otros trabajando.

La muerte, cuando nos llega,
vuelve de nuevo a igualarnos.
Sólo la parafernalia
es diferente si acaso.

¿Merece vivir la vida
continuamente enfrentados?
¿A qué tanto sufrimiento
que entre todos nos causamos?

Si no es posible ser reyes,
que tampoco haya vasallos.
Con justicia y libertad;
con ambas sólo me apaño.

P. G. V.
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¡PEDRO QUE FRÍO! Si aquí estamos tiritando, como andaréis vosotros.
¡Vaya letrillas! Ya quisiéramos muchos igualarlas.
Para que te de rabia, ayer, de postre "calostros" ¿Desde cuando no los pruebas?
Dices que todos, nacemos llorando, y es así, yo te dejo estas letrillas, donde lloran todos. Para tí y para todos los amigos de este foro.

CON LA AYUDA DEL SEÑOR

Era en plena primavera
De un abril para soñar
Un carril muy bien cuidado
Y un coche para llegar.

Allí nos fuimos los dos
Para pasar unos días
La casa llena cacharros
Y la barriga vacía

En la casita de campos
Tres leguas del pueblo, dista
Nos fuimos a descansar
Y a relajar nuestra vista

Ella estaba en ocho meses
Pero sin molestia alguna
Todo estaba preparado
Incluso teníamos cuna

Por las mañanas temprano
Cuando el sol besa el rocío
Nos dábamos un paseo
Por la orillita del río

Se quedaba embelezada
Mirando los gorriones
Que ya buscaban recodos
Debajo los canalones

Iba cogiendo las flores
Que nacen en los caminos
Haciendo ramos con ellas
Y un florero su destino

En el ocaso del día
A la luz de una candela
Recordábamos los tiempos
Que se alumbraba con vela

Los días parecían horas
Pues se pasaban volando
Mientras se escuchaba un grillo
Y algún cervato trotando

Nos marcharemos mañana
Que me faltan pocos días
Mientras se echaba en la cama
Y se quedaba dormia

Empezaron los dolores
Por la mañana temprano
Pero el coche no arrancó
El móvil estaba en sus manos

Se nos fue la cobertura
Ella hincada de rodillas
Yo suplicándole a Dios
¡Que nazca bien mi chiquilla!

De mecánica no entiendo
Y menos de paritorio
Pero a mí Dios le pedía
¡Sácame del purgatorio!

Llegarme al pueblo ¡Imposible!
Tres leguas es mucho camino
¡Pero qué puedo hacer yo!
¡Que se cumpla su destino!

¡Si la perrita ha parido!
Sin tener ayuda ninguna
¡Por qué no va a parir ella!
Y con la misma fortuna

Mil pregunta que me hacía
Escuchándola gritando
Pero no tenía respuesta
Y mi amor seguía chillando

¡Le supliqué al Dios del Cielos!
Que termine mi locura
Todo quedó en un silencio
Terminando mi amargura

¡Subió a lo alto, su grito!
Mientras despertaba un llanto
Mi tesoro había nacido
Con su carita de encanto

Gracias Señor, ¡Me escuchaste!
Mi niña sana llegó
Sin médico ni partera
Solo la ayuda de Dios
A. E. I.

Buenos días, amigos de Santa Bárbara.

ANTONIO ESCUDERO: Ya ni recuerdo cuando fue la última vez que tomé calostros. En honor a la verdad, no es de lo que más me gustaba. Posiblemente por un prejuicio absurdo. A mi contraria, sin embargo, le encanta. Ella, cuando vamos, si tiene la oportunidad, lo toma con avidez.
Antonio, creo que tú conocías s SEVE en el foro de El Cerro. Y digo conociás, porque me he enterado que ha fallecido. Su último mensaje lo dejó en su pueblo, Riópar (Albacete), y fue en diciembre. Yo no le conocí; estaba casado con una cerreña (su Benitilla, como él la llamaba)
Le he dedicado estas letrillas:

EN RECUERDO DEL AMIGO SEVE

Amigo SEVE, te has ido
como a la chita callando.
Sin consultarlo con nadie,
te fuiste al otro barrio.

Dejaste aquí tu familia,
y a tus amigos llorando,
en espera de mensajes,
que no podrás ya enviarnos.

Mas, tu recuerdo perenne
nos dejas para aliviarnos.
En mi pueblo y en tu pueblo
con eso nos conformamos.

Aunque no te conocí,
-como hubiera deseado-,
por tus escritos yo supe,
que eras hombre de calado.

Nunca unas malas palabras,
salieron de tu teclado.
Sólo honradez y bondad,
vieron tus comunicados.

Adiós, mi querido amigo,
y no olvides que has dejado,
huérfanos por estos foros,
que no olvidan tu legado.

Descanse en paz este buen hombre.

PEDRO, si que conocía al amigo SEVE, pero igual que tú. Nos encontramos en más de un foro y, lo que tu dices, siempre amable y sin molestar a nadie. Todo un Señor.
Tus letras, en su honor, muy sentidas y bonitas.
Un abrazo