Los orígenes de
Zufre como población hay que situarlos en tiempos de los
romanos. Los visigodos pasaron sin pena ni gloria por una villa que acabaría siendo reutilizada por los moros llegados a la península en el s. VIII. Al igual que los romanos, los árabes supieron explotar tanto la faceta agrícola como la defensiva, de esta población. En 1246 el paladín Pelay Correa tomó, por orden de Fernando III, la alquería mora, y fundó la
ermita de Nuestra Señora del
Puerto, patrona de Zufre. A partir de esas fechas Zufre corrió la misma suerte que el resto de los territorios peninsulares bajo el poder castellano.
La ciudad, cuyo topónimo proviene de la palabra árabe "Sufre" (tributo), posee el clásico trazado de las antiguas urbes islámicas. De su patrimonio
artístico destaca sobremanera el
edificio del
ayuntamiento de 1570.
En 1594 formaba parte del reino de
Sevilla en la
Sierra de Aroche y contaba con 314 vecinos pecheros
El libro 'Expedientes carcelarios de Zufre (
Huelva). Prisión Provincial, 1936-1939' (Facediciones, 2008), de Juan José Antequera Luengo y Juan José Luengo Jiménez, da cuenta de cuantos vecinos sufrieron prisión durante la guerra civil española.