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MARIA LUISA, donde andas.
EMIGRAO, tuve que retirarme para enviar unas fotos a mi hijo que anda por Australia pero, creo recordar, te marchabas a comer unos suculentos manjares por ser tu cumpleaños. Si es así, MUCHAS FELICIDADES.
Otra cosa EMIGRAO, ya se que te enteraste de la que tienen liar los chavales con eso de traer el Museo a la calle, pero es que el día que está haciendo es para traerse unas costillitas de cerdo ibérico o un poco de panceta o tal vez, mejor, unas presas de secreto o de pluma, o de lagarto, que están para chuparse los dedos. La presa de lagarto es de cerdo ibérico también.
Hasta mañana. Saludos.
OCTAVIO, cuanta razón llevas con lo del cemento. Nos están llenando todo de cemento. Ya no se respeta nada, por aquí, en nuestra zona, gracias a Dios que los pueblos están muy separados unos de otros y queda bastante terreno para construir, pero hay pueblo grandes que no vez nada más que cemento. Donde juegan nuestros hijos, nuestros nietos. La calle para los coches subidos en las aceras. Las aceras para las cacas de los perritos pues son pocos los que saben tener un animal en casa. Los parques reducidos a la minita expresión y así nos va en muchos lugares. Huelva, afortunadamente, tiene bastantes zonas verdes, pero faltan lugares de juegos para la chavalería sin que molesten a los peatones y vecinos. Lo de nuestras montañas quizás que sea un mal menor, por lo menos en esta zona. Ahora se están dando cuenta que no se deben cambiar nuestros pueblos de su arquitectura y parece que ponen un poco de freno. Lo mismo está pasando con nuestros campos y con nuestra flora. Ahora, cuando ya, en muchos sitios es demasiado tarde. En los años cincuenta, DON DINERO, arrancó todas cuantas encinas encontró en su camino para plantar eucaliptos que eran más rentables. Compraron los terrenos a un precio miserable, yo te podría decir, les quitaron a los infelices campesinos sus terruños para plantar esos feos árboles arrancando encinas, olivos y todo lo que encontraron a su paso. Destruyeron nuestro pasado no respetando restos arqueológicos ni de ninguna clase. No sigo, me pondo malo. Hoy parece que se están dando cuenta de ello y las encinas que arrancan por desvíos de carreteras u otras vías, se plantan en otros lugares. OCTAVIO, que no nos llamen arcaicos, añejos o viejos, somos nativos que nos gusta lo nuestro. Saludos y perdona el rollo.
EMIGRAO, tuve que retirarme para enviar unas fotos a mi hijo que anda por Australia pero, creo recordar, te marchabas a comer unos suculentos manjares por ser tu cumpleaños. Si es así, MUCHAS FELICIDADES.
Otra cosa EMIGRAO, ya se que te enteraste de la que tienen liar los chavales con eso de traer el Museo a la calle, pero es que el día que está haciendo es para traerse unas costillitas de cerdo ibérico o un poco de panceta o tal vez, mejor, unas presas de secreto o de pluma, o de lagarto, que están para chuparse los dedos. La presa de lagarto es de cerdo ibérico también.
Hasta mañana. Saludos.
OCTAVIO, cuanta razón llevas con lo del cemento. Nos están llenando todo de cemento. Ya no se respeta nada, por aquí, en nuestra zona, gracias a Dios que los pueblos están muy separados unos de otros y queda bastante terreno para construir, pero hay pueblo grandes que no vez nada más que cemento. Donde juegan nuestros hijos, nuestros nietos. La calle para los coches subidos en las aceras. Las aceras para las cacas de los perritos pues son pocos los que saben tener un animal en casa. Los parques reducidos a la minita expresión y así nos va en muchos lugares. Huelva, afortunadamente, tiene bastantes zonas verdes, pero faltan lugares de juegos para la chavalería sin que molesten a los peatones y vecinos. Lo de nuestras montañas quizás que sea un mal menor, por lo menos en esta zona. Ahora se están dando cuenta que no se deben cambiar nuestros pueblos de su arquitectura y parece que ponen un poco de freno. Lo mismo está pasando con nuestros campos y con nuestra flora. Ahora, cuando ya, en muchos sitios es demasiado tarde. En los años cincuenta, DON DINERO, arrancó todas cuantas encinas encontró en su camino para plantar eucaliptos que eran más rentables. Compraron los terrenos a un precio miserable, yo te podría decir, les quitaron a los infelices campesinos sus terruños para plantar esos feos árboles arrancando encinas, olivos y todo lo que encontraron a su paso. Destruyeron nuestro pasado no respetando restos arqueológicos ni de ninguna clase. No sigo, me pondo malo. Hoy parece que se están dando cuenta de ello y las encinas que arrancan por desvíos de carreteras u otras vías, se plantan en otros lugares. OCTAVIO, que no nos llamen arcaicos, añejos o viejos, somos nativos que nos gusta lo nuestro. Saludos y perdona el rollo.