Los primeros testimonios de los orígenes de Albanchez se remontan al Paleolítico Inferior y Medio. La
Cueva de los Esqueletos o Cueva de las figuras fue una necrópolis de los primeros aborígenes pues, se encontraron en ella bastantes esqueletos en semicírculo en torno a una olla de barro e instrumentos de pedernal.
La presencia de los Iberos en Albanchez también se hace notar. Muestra de esta cultura es el friso de
piedra llamado "Cérvido Ibérico", encontrado en esta población y que se encuentra ubicado en el
Museo Arqueológico provincial.
También hay huellas de un
pueblo romano, como lo atestiguan los restos del poblado "Campaneana" en el lugar denominado actualmente Campaníl.
En la época de la Reconquista, siglos VIII al XIV, fue cuando Albanchez se configuraría como núcleo habitable. Pertenecía a la provincia de las Alpujarras y a la Cora de
Jaén.
Hacia el siglo XI se construyó la
muralla de la población, a las faldas del
castillo y cuyos restos son aún hoy visibles.
En 1.231, las tropas de Fernando III el
Santo reconquistan esta población y en 1309 Fernando IV concede la aldea de Albanchez a la Encomienda de la Orden de Santiago, quedando como aldea de Bedmar para formar posteriormente junto con éste municipio: "La Encomienda de Bedmar y Albanchez". La causa de esta concesión es doble: por una parte, como
premio por ayudar en su reconquista, pero, sobre todo, porque las tropas reales no pueden defenderla de la proximidad e incursiones de los "moros".
En 1231 las tropas de Fernando III de Castilla reconquistan esta población, que perteneció al señorío de
Jódar hasta 1238, en que fue vendido a Úbeda. En 1309, Fernando IV de Castilla concede Albanchez a la Encomienda de la Orden de Santiago, quedando como aldea de Bedmar, para formar posteriormente, junto con este lugar, la Encomienda de Bedmar y Albanchez.
Tras la conquista castellana se levantará en la cima de la peña el pequeño castillo. Posiblemente fue construido por la Orden de Santiago, pues la forma redondeada de sus
esquinas son típicas de esta Orden, que desempeñó un papel crucial, durante todo el siglo XIV, en este lugar fronterizo con "los moros de
Granada".
En 1.419 el infante D. Enrique le concedió el Título de Villa, separándola de la de Bedmar.
La vida de los hombres y mujeres de Albanchez transcurrió, a lo largo de la Edad Moderna, dentro de los parámetros propios de su entorno: una fase de crecimiento demográfico (auspiciado por las medidas repobladoras tras la Reconquista) y el desarrollo de una economía de carácter agrario centrada, según un informe del siglo XVI, en la cría de perdices y palomas, pequeñas producciones de trigo y cebada y la cría del
ganado cabrío, lanar y
vacuno.
El aspecto de
ruina, por abandono, que ofrecía el castillo de Albanchez a fines del siglo XVI, o el mismo hundimiento de la
Iglesia parroquial (Ntra Sra del Rosel) evidenciaba con claridad la decadencia que comenzaba en
España. Hubo que esperar al cambio dinástico y a los propósitos reformistas de los borbones para que se intentaran poner en práctica fórmulas con las que remediar aquella situación. La construcción del actual templo parroquial de la Asunción de tres naves sostenidas en seis robustas
columnas en el año 1622 es prueba de la llegada a Albanchez de algunas reformas.
En el siglo XVIII la población era
joven, ya que de las 643 almas que había, sólo 14 individuos superaban los sesenta años. 359 eran varones, entre los que había 18 viudos, 9 solteros y 15 clérigos. De las 294 mujeres, 18 eran viudas y dos "doncellas".
En el siglo XIX, con la Desamortización de Mendizabal, desapareció por completo los restos de la Encomienda de Santiago. En este siglo, en 1850, Albanchez contaba con 1193 habitantes. Las escasas y difíciles comunicaciones de Albanchez, además de la economía agraria de subsistencia de la población, provocaron en nuestro pueblo una crisis que aún no se ha superado.
El siglo XX, aparte de la Guerra Civil, sólo tiene de característico la pérdida de población. De los 2684 habitantes en 1945, se han pasado a los 2191 en 1975, y a los 1540 en 1996. Se han perdido más de 1000 habitantes en los últimos cincuenta años.