Hasta el desierto, tiene cosas hermosas, pero
arquillos, tiene sus olivas, y cuando las bendice la
lluvia, que con intermitencias, de sequias siempre acude a regar, se vuelve un vergel como se aprecia por las
fotos, tiene
agua y lo mejor que tiene son sus gentes, las que quedan, y las que nos fuimos, que conservamos, lo que nuestros padres nos trasmitieron, y dejamos nosotros por el mundo.
Un optimista peligroso, sin ninguna razon parar serlo.
Te.m.m.