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MACHADO Y BAEZA
Entre olivares hermosos
y sueños de Andalucía,
hay caminos orgullosos
que son pura fantasía.
Machado marcó distancia
con versos que son lecciones,
y nos dejó su elegancia
en sus buenas sensaciones.
Entre piedras milenarias
viven cuidando su entorno,
con frases extraordinarias
en aquel bello contorno.
Machado dejó sus huellas
que hoy se siguen recordando,
escribiendo a las estrellas
que en Baeza van brillando.
Olivares que son signos
de sus paisajes soñados,
Machado habló de destinos
y de campos encantados.
Cuando se sueñan pasiones
de otras tierras castellanas,
pueden surgir confusiones
entre las gentes cristianas.
Machado llorando ausencia
fue testigo penitente,
sufriendo tuvo paciencia
para hacer grande su ambiente.
Versos llenos de leyendas
le hicieron soñar despierto,
pisó en Baeza sus sendas
al ver su presente incierto.
Machado marcó su rumbo
entre murallas de piedra,
buscó dulzura en su mundo
al ver de cerca su tierra.
Seis años dando lecciones
y haciendo nuevos caminos,
sembrando las emociones
de sus versos tan divinos.
Machado vive en sus calles
donde tuvo su destino,
son multitud de detalles
que hoy recuerdan su camino.
Sombras de Soria en su vida
entre olivares altivos,
bonita ruta elegida
en sus penosos motivos.
El Burgo de Osma y Baeza
dos lugares escogidos,
Machado marcó nobleza
en sus sueños deprimidos.
Han de pasar muchos años
con sus versos aprendidos,
subirán muchos peldaños
sin verse nunca perdidos.
Baeza marcó en su historia
un lugar para el olvido,
hoy se recuerda su gloria
que aquí jamás se ha perdido.
G X Cantalapiedra.
Entre olivares hermosos
y sueños de Andalucía,
hay caminos orgullosos
que son pura fantasía.
Machado marcó distancia
con versos que son lecciones,
y nos dejó su elegancia
en sus buenas sensaciones.
Entre piedras milenarias
viven cuidando su entorno,
con frases extraordinarias
en aquel bello contorno.
Machado dejó sus huellas
que hoy se siguen recordando,
escribiendo a las estrellas
que en Baeza van brillando.
Olivares que son signos
de sus paisajes soñados,
Machado habló de destinos
y de campos encantados.
Cuando se sueñan pasiones
de otras tierras castellanas,
pueden surgir confusiones
entre las gentes cristianas.
Machado llorando ausencia
fue testigo penitente,
sufriendo tuvo paciencia
para hacer grande su ambiente.
Versos llenos de leyendas
le hicieron soñar despierto,
pisó en Baeza sus sendas
al ver su presente incierto.
Machado marcó su rumbo
entre murallas de piedra,
buscó dulzura en su mundo
al ver de cerca su tierra.
Seis años dando lecciones
y haciendo nuevos caminos,
sembrando las emociones
de sus versos tan divinos.
Machado vive en sus calles
donde tuvo su destino,
son multitud de detalles
que hoy recuerdan su camino.
Sombras de Soria en su vida
entre olivares altivos,
bonita ruta elegida
en sus penosos motivos.
El Burgo de Osma y Baeza
dos lugares escogidos,
Machado marcó nobleza
en sus sueños deprimidos.
Han de pasar muchos años
con sus versos aprendidos,
subirán muchos peldaños
sin verse nunca perdidos.
Baeza marcó en su historia
un lugar para el olvido,
hoy se recuerda su gloria
que aquí jamás se ha perdido.
G X Cantalapiedra.