Mi más grato recuerdo y mi más hondo pesar, triste paradoja, para ese pueblo tan querido; Bélmez de la Moraleda (Jaén), cuanto daría yo para que subiera como la espuma, por esa gente humilde, esa gente de buen pensar de hondo corazón y de firme caminar, de palabra sencilla, la que te estrecha aún la mano y aprieta con el corazón, su palabra una escritura, su mirada profunda sin vacilar, no engaña y respeta al que sabe respetar; esa gente es la mía, la que no se deja engañar, la que piensa y reflexiona, la que escucha dos veces antes de hablar, la que no obedece a consignas de partido/s, se revela ante la injusticia, ante el engaño por engañar, esa gente es la mía la que yo quiero respeto y respetaré porque en su forma de proceder te demuestra su honradez.
Algunos hablan de dar ideas, que se lo pregunten a la Sra. Alcaldesa; ¿por qué? se llevaron el lavadero de los pantalones vaqueros a Huelma, donde podían vivir ocho o diez familias, ¿ por qué? no se ha movido para montar un geriátrico donde el edificio denominado Los Indios y aprovecha esas infraestructuras para algo que no sea guardar las maquinarias de sus acólitos afines a las consignas de su partido. P.S.O.E., por cierto las dos últimas siglas creo que le sobran, la de obrero y la de Español. Otro día más.
El Nazareno.
Algunos hablan de dar ideas, que se lo pregunten a la Sra. Alcaldesa; ¿por qué? se llevaron el lavadero de los pantalones vaqueros a Huelma, donde podían vivir ocho o diez familias, ¿ por qué? no se ha movido para montar un geriátrico donde el edificio denominado Los Indios y aprovecha esas infraestructuras para algo que no sea guardar las maquinarias de sus acólitos afines a las consignas de su partido. P.S.O.E., por cierto las dos últimas siglas creo que le sobran, la de obrero y la de Español. Otro día más.
El Nazareno.