Estas tierras estuvieron pobladas desde los tiempos prehistóricos más remotos, la documentación de utensilios de sílex en la
Cueva del
Agua presagia su ocupación desde la Edad de
Piedra. De la Edad del Bronce (II milenio a C.) se ha documentado una masiva ocupación por los márgenes del
río Guadalimar, que vuelve a estar atestiguada para época
romana. De una etapa anterior, ibérica tardía, son los restos de una fortificación en el cerro del
Castillo del Cortijo de las
Fuentes.
De época islámica es la fortaleza de Cardete, visible en el horizonte, a escasos kilómetros de
Benatae. El recinto es una construcción trapezoidal irregular con una
torre troncopiramidal en el lado menor. En esta etapa Benatae debía ser una aldea, entre otras que poblaban su territorio, dependientes de la mencionada fortaleza.
En la crónica de las conquistas de Fernando III no aparece citada esta población, hecho que atestigua que no era más que una aldea y que no tenía fortificación. No obstante debió ser ocupada entre 1226 y 1242, al mismo tiempo que la mayor parte de la
Sierra de Segura.
Fernando III la cedió a la Orden de Santiago y fue adscrita a la Encomienda Mayor de Castilla. Desde este momento su
historia estuvo ligada a la de esta Orden y a la del resto de la comarca de
Segura de la Sierra. Perteneció a la Real Chancillería de
Granada y al Obispado de Cartagena. Entre 1243 y 1245, cuando se trasladó la Encomienda Mayor a Segura, se adscribió a esta.
A finales del XIV y principios del XV debía de haberse consolidado su población y tener cierta entidad pues, según se refiere en las "Relaciones" de Felipe II , Benatae fue elevada a Villa por Juan II en 1415.
Estas tierras estuvieron pobladas desde la Edad de Piedra. De la Edad del Bronce (II milenio a C.) se ha documentado una masiva ocupación por los márgenes del río Guadalimar, que vuelve a estar atestiguada para época romana. De una etapa anterior, ibérica tardía, son los restos de una fortificación en el cerro del Castillo del Cortijo de las Fuentes. De época islámica es la fortaleza de Cardete, visible en el horizonte, a escasos kilómetros de Benatae. El recinto es una construcción trapezoidal irregular con una torre troncopiramidal en el lado menor. En esta etapa Benatae debía ser una aldea, entre otras que poblaban su territorio, dependientes de la mencionada fortaleza. En la crónica de las conquistas de Fernando III no aparece citada esta población, hecho que atestigua que no era más que una aldea y que no tenía fortificación. No obstante debió ser ocupada entre 1226 y 1242, al mismo tiempo que la mayor parte de la Sierra de Segura. Fernando III la cedió a la Orden de Santiago y fue adscrita a la Encomienda Mayor de Castilla. Desde este momento su historia estuvo ligada a la de esta Orden y a la del resto de la comarca de Segura de la Sierra. Perteneció a la Real Chancillería de Granada y al Obispado de Cartagena. Entre 1243 y 1245, cuando se trasladó la Encomienda Mayor a Segura, se adscribió a esta. A finales del XIV y principios del XV debía de haberse consolidado su población y tener cierta entidad pues, según se refiere en las Relaciones de Felipe II , Benatae fue elevada a Villa por Juan II en 1415.