Uno de los grandes atractivos que despierta
Cabrita es su gran valor etnologico, dados los tiempos que corren. Todavia las gentes que desde siglos viven en Cabrita conservan
costumbres muy arraigadas como las matanzas en los duros meses de
invierno, que son la excusa perfecta para reunirse toda la
familia alrededor de un buen marrano y de la candela y pasarlo bien entre chacinas y vinos. Otra
costumbre ya casi extinguida era por la legania de los nucleos urbanos de autoabastecimiento de sus gentes, donde en toda Cabrita podiamos encontrar gran numero de
molinos de
agua para hacer
pan y moler la
aceituna, la gran mayoria de ellos se encuentran en
ruinas, pero existe uno denominado "
Molino pincel" que aun hoy realiza pan de forma tradicional.