De quien ha sidola idea?
Vengándose, uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él.
La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.
Odiar es un despilfarro del corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro.
Cuando odiamos a alguien, odiamos en su imagen algo que está dentro de nosotros.
Vengándose, uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él.
La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.
Odiar es un despilfarro del corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro.
Cuando odiamos a alguien, odiamos en su imagen algo que está dentro de nosotros.