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No midas tu riqueza por el dinero que tienes, mídela por aquellas cosas que tienes y que no cambiarías por dinero.
Alimentados de pesimismo no vivimos la vida, la sufrimos.
La esperanza es la virtud más temprana y más indispensable en el ser vivo.
El sol brilla en todas partes, pero algunos no ven más que sus sombras.
Buenas noches Antonia. buen descanso.. un abrazo en la distancia.
DISTINTAS MIRADAS

Durante la segunda guerra mundial los nazis mataron a un grupo de judíos y los enterraron en una fosa común. Un muchacho de unos doce años estaba todavía vivo y poco a poco logró salir de la tumba poco profunda. Llamó a las puertas del vecindario pero al verlo cubierto de tierra, le cerraron las puertas.
Una mujer estaba a punto de hacer lo mismo cuando el muchacho le dijo: "Señora, ¿no me reconoce? Soy ese Jesús que ustedes los cristianos dicen que aman.
La mujer empezó ... (ver texto completo)
He dejado de buscar a la gente, porque las que realmente importan no las encuentras ni hacia atrás, ni hacia adelante, sino al lado.
Cuando mostramos nuestro respeto por los demás seres vivos, ellos responden con respeto hacia nosotros.
Los locos abren los caminos que más tarde recorren los sabios.
Quien intenta ayudar a una mariposa a salir de su capullo, la mata.
Buenas noches Antonia. feliz descanso. un abrazo en la distancia.
Buenas noches Sensi, que tengas un buen descaso, hasta mañana un abrazo.
Buenas noches Antonia. feliz descanso. un abrazo en la distancia.
El Té

Un importante catedrático universitario se encontraba últimamente en extraños estados de ánimo: se sentía ansioso, infeliz y si bien creía ciegamente en la superioridad que su saber le proporcionaba, no estaba en paz consigo mismo ni con los demás. Su infelicidad era tan profunda cuan su vanidad. En un momento de humildad había sido capaz de escuchar a alguien que le sugería aprender a meditar como remedio a su angustia. Ya había oído decir que el zen era una buena medicina para el espíritu.
En su región vivía un excelente maestro y el profesor decidió visitarle para pedirle que le aceptara como estudiante.
Una vez llegado a la morada del maestro, el profesor se sentó en la humilde sala de espera y miró alrededor con una clara -aunque para él imperceptible- actitud de superioridad. La habitación estaba casi vacía y los pocos ornamentos sólo enviaban mensajes de armonía y paz. El lujo y toda ostentación estaban manifiestamente ausentes.
Cuando el maestro pudo recibirle y tras las presentaciones debidas, el primero le dijo: "permítame invitarle a una taza de té antes de empezar a conversar". El catedrático asintió disconforme. En unos minutos el té estaba listo. Sosegadamente, el maestro sacó las tazas y las colocó en la mesa con movimientos rápidos y ligeros al cabo de los que empezó a verter la bebida en la taza del huésped. La taza se llenó rápidamente, pero el maestro sin perder su amable y cortés actitud, siguió vertiendo el té. El líquido rebosó derramándose por la mesa y el profesor, que por entonces ya había sobrepasado el límite de su paciencia, estalló airadamente tronando así: " ¡Necio! ¿Acaso no ves que la taza está llena y que no cabe nada más en ella?". Sin perder su ademán, el maestro así contestó: "Por supuesto que lo veo, y de la misma manera veo que no puedo enseñarte el zen. Tu mente ya está también llena". ... (ver texto completo)
Si vamos en la dirección correcta, todo lo que debemos de hacer es seguir caminando".
(Proverbio budista)
Gracias a esas personas que nos curan, nos escuchan, nos abrazan y nos hacen sonreir.