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Hola "Canito", para mí Manolo "Pucherete" yo a tí si te conozco bien y creo que tu a mí también aunque nos separen bastantes años, pero por ser amigo de mis primos mayores como Lili, Mª Virtudes, Merceditas y Antonio Luis y por ser primo a su vez de mis primas Rosario y Eva eras un asiduo en casa de mis abuelos Felipe y Virtudes. Recuerdo con mucho cariño tu boda pues fue mi primera salida de Frailes sin mis padres, aunque iba bien acompañada por todos los primos que antes he nombrado (tengo fotos que inmortalizaron ese buen momento). Sobre lo que preguntabas del libro de Michael, a mi personalmente me gustó, me reí mucho con las definiciones tan acretadas de un viaje con Manolo el "Sereno" al volante. Pero mi opinión puede estar algo adulterada por ser frailera y conocer de primera mano todo lo que explica, pero hay varias personas a las que le regalé el libro y que son totalmente ajenas a Frailes y les enganchó desde el primer momento; pero ya se sabe sobre gustos y colores no hay nada escrito.
Sobre la visita de Imanol Arias y Juan Echanove te diré que si que han estado con Manolo y que algunos curiosos nos hemos acercado a conocerlos. La primera impresión ha sido agradable han atendido a la gente entre grabación y grabación, pero algo me ha llamado la atención, para ser un programa gastronómico centrado en la buena comida, todos los del equipo "gastaban más hambre que un perrillo chico", van tan deprisa que no les dejan ni comer.
En cuanto al tema de la enseñanza, creo que me tocó vivir una buena época, a los maestros se les respetaba, pero había una relacción cordial, yo por lo menos tenía muy en cuenta que la persona que tenía delante sabía más que yo y no podía dirigirme a él o ella de cualquier forma, pero miedo lo que se dice miedo no se les tenía. El camino del medio como dicen los budistas, es el buen camino para algunas cosas, claro. Perdón por enrollarme.
Sobre la visita de Imanol Arias y Juan Echanove te diré que si que han estado con Manolo y que algunos curiosos nos hemos acercado a conocerlos. La primera impresión ha sido agradable han atendido a la gente entre grabación y grabación, pero algo me ha llamado la atención, para ser un programa gastronómico centrado en la buena comida, todos los del equipo "gastaban más hambre que un perrillo chico", van tan deprisa que no les dejan ni comer.
En cuanto al tema de la enseñanza, creo que me tocó vivir una buena época, a los maestros se les respetaba, pero había una relacción cordial, yo por lo menos tenía muy en cuenta que la persona que tenía delante sabía más que yo y no podía dirigirme a él o ella de cualquier forma, pero miedo lo que se dice miedo no se les tenía. El camino del medio como dicen los budistas, es el buen camino para algunas cosas, claro. Perdón por enrollarme.
Muy buenas de nuevo.
Hola, Belén (Arenita). Ahora sí puedo decir como en el chiste ese tan viejo que contábamos por el pueblo: "Ahora sé donde vives y sé donde trabajas". La verdad es que desde el primer día que vi un mensaje tuyo en el foro me pareció que eras tú. Es verdad lo que dices "emparentamos" por casi todos los lados aunque entre nosotros no haya parentesco real (Bueno, no estoy tan seguro...). Saluda a Indale y esposa de mi parte y a tu hermano. Por supuesto también a Pedro Jesús que, por eso de la diferencia de edad y el no residir yo en el pueblo, la relación es poca, aunque nos conozcamos de vista. Por cierto, en un libro editado por el Diario Jaén que recoge "piropos" a nuestra provincia, ¿no hay por casualidad un texto escrito por él?
Aludía en mis mensajes anteriores al libro de Michael porque buscando y buscando en prensa e Internet he comprobado que había muchas opiniones poco agradables y bastantes críticas, no sé si por alusiones concretas a personas que aparecen en él.
Es verdad que tú, y muchos foreros como tú, aún no habíais nacido aquel dichoso 23-F. Precisamente hace un rato lo comentaba con mi mujer: yo ya había terminado la carrera y, posteriormente la mili. Hacía sólo unos meses que me había licenciado y estaba en el pueblo ayudando a mi padre en las tareas de la aceituna ("las morenas") mientras me daban destino o no (y me lo dieeron al mes siguiente). Como te decía establa en plena aceituna; habíamos llegado a mi casa (al callejón de Pucherete) y estábamos descargando los sacos de aceituna que traíamos en los dos burros que tenía entonces mi padre. Todo eso ocurría mientras escuchaba el transistor que llevaba todos los días conmigo. No te puedes imaginar el cuerpo que se me puso, pues lo primero que pensé era que si había "jaleo" a los primeros que llamarían sería a los soldados recién licenciados. Como te puedes imaginar, esa noche hasta que no acabé de escuchar el discurso de nuestro Rey, no pude pegar ojo. Supongo que por eso ya tengo el pelo blanco: ya puedo contar batallitas y todo.
Un beso, Belén.
Hola, Belén (Arenita). Ahora sí puedo decir como en el chiste ese tan viejo que contábamos por el pueblo: "Ahora sé donde vives y sé donde trabajas". La verdad es que desde el primer día que vi un mensaje tuyo en el foro me pareció que eras tú. Es verdad lo que dices "emparentamos" por casi todos los lados aunque entre nosotros no haya parentesco real (Bueno, no estoy tan seguro...). Saluda a Indale y esposa de mi parte y a tu hermano. Por supuesto también a Pedro Jesús que, por eso de la diferencia de edad y el no residir yo en el pueblo, la relación es poca, aunque nos conozcamos de vista. Por cierto, en un libro editado por el Diario Jaén que recoge "piropos" a nuestra provincia, ¿no hay por casualidad un texto escrito por él?
Aludía en mis mensajes anteriores al libro de Michael porque buscando y buscando en prensa e Internet he comprobado que había muchas opiniones poco agradables y bastantes críticas, no sé si por alusiones concretas a personas que aparecen en él.
Es verdad que tú, y muchos foreros como tú, aún no habíais nacido aquel dichoso 23-F. Precisamente hace un rato lo comentaba con mi mujer: yo ya había terminado la carrera y, posteriormente la mili. Hacía sólo unos meses que me había licenciado y estaba en el pueblo ayudando a mi padre en las tareas de la aceituna ("las morenas") mientras me daban destino o no (y me lo dieeron al mes siguiente). Como te decía establa en plena aceituna; habíamos llegado a mi casa (al callejón de Pucherete) y estábamos descargando los sacos de aceituna que traíamos en los dos burros que tenía entonces mi padre. Todo eso ocurría mientras escuchaba el transistor que llevaba todos los días conmigo. No te puedes imaginar el cuerpo que se me puso, pues lo primero que pensé era que si había "jaleo" a los primeros que llamarían sería a los soldados recién licenciados. Como te puedes imaginar, esa noche hasta que no acabé de escuchar el discurso de nuestro Rey, no pude pegar ojo. Supongo que por eso ya tengo el pelo blanco: ya puedo contar batallitas y todo.
Un beso, Belén.