Buenas noches señor Belmongtes y desmas foreros, hoy os voy a contar la historia de una de esas noches oscuras;
hace ya unos años, unos amigos me convencieron para ir de furtivos a cojer cangrejos autoctonos (exquisito y escaso manjar).
Para comezar nuestra andada ha eso de las doce de la noche cargados de una mochila y una linterna (el Dionisio, el manuel y un susodicho) nos lanzamos a la sierra como alimañas nocturnas; en nuestro afan por no despertar sospechas, dejamos el coche escondido en el cortijo de Liborio, y empezamos a andar.
Esa noche era una de las mas oscuras que yo recuerdo, no habia luna y la linterna apenas alumbraba un metro telante de mi; despues de media hora andando dimos con el lugar; un riachuelo con apenas caudal y para cojer los cangrejos habia que meterse en en agua, por lo cual nos pusimos empapaicos y a final para cojer un kilo de cangrejos.
Pues despues de hartarnos de mojarnos decidimos volvernos para el coche, pero estabamos en el fondo del barranco de hollo (sitio precioso, pero para ir de dia), los otros dos esperimentados furtivos miraron las sombras de los cerros y en su intuitiva perspicacia para andar de noche por esas sierras no fiamos y despues de dos horas andando de noche y empapados pudimos dar con el coche y todo por un puñado de cancrejos de rio. Desde entonces no se me ha ocurrido ir a cojer mas cangrejos a la sierra.
Aunque por lo menos escapamos bien no como les paso a otras alimañas que les tubo que alumbrar con la linterna el guardia civil de turno para que pudieran ver los cangrejos (VERDAD CARLOS).
hace ya unos años, unos amigos me convencieron para ir de furtivos a cojer cangrejos autoctonos (exquisito y escaso manjar).
Para comezar nuestra andada ha eso de las doce de la noche cargados de una mochila y una linterna (el Dionisio, el manuel y un susodicho) nos lanzamos a la sierra como alimañas nocturnas; en nuestro afan por no despertar sospechas, dejamos el coche escondido en el cortijo de Liborio, y empezamos a andar.
Esa noche era una de las mas oscuras que yo recuerdo, no habia luna y la linterna apenas alumbraba un metro telante de mi; despues de media hora andando dimos con el lugar; un riachuelo con apenas caudal y para cojer los cangrejos habia que meterse en en agua, por lo cual nos pusimos empapaicos y a final para cojer un kilo de cangrejos.
Pues despues de hartarnos de mojarnos decidimos volvernos para el coche, pero estabamos en el fondo del barranco de hollo (sitio precioso, pero para ir de dia), los otros dos esperimentados furtivos miraron las sombras de los cerros y en su intuitiva perspicacia para andar de noche por esas sierras no fiamos y despues de dos horas andando de noche y empapados pudimos dar con el coche y todo por un puñado de cancrejos de rio. Desde entonces no se me ha ocurrido ir a cojer mas cangrejos a la sierra.
Aunque por lo menos escapamos bien no como les paso a otras alimañas que les tubo que alumbrar con la linterna el guardia civil de turno para que pudieran ver los cangrejos (VERDAD CARLOS).
Malos pelos, todo lo que cuentas sobre los cangrejos y yo es verdad pero vosotros fuisteis mas zoquetes, por que estar media noche para un kilo....... nosotros por lo menos para cuando nos hecharon las linternas llevabamos un saco pero si es verdad que nosotros no los probamos se los comieron los cibiles el dia del Corpus a nuestra salud. Carlos
Ya sabes, la avaricia rompe el saco,
estariais de ver, diciendo al guardia civil, (alumbra aqui a la poza, que aqui estan los gordos)
SI ES QUE NO SERVIMOS PARA FURTIVOS... ¿O NO?.
estariais de ver, diciendo al guardia civil, (alumbra aqui a la poza, que aqui estan los gordos)
SI ES QUE NO SERVIMOS PARA FURTIVOS... ¿O NO?.