Mi marido y yo sentimos las pérdidas recientes que has sufrido en tu familia. Hay que tomarlas con la mayor objetividad posible, pero siempre remueven recuerdos, muchos recuerdos de ellos, de los seres queridos relacionados con ellos, y de las vivencias de uno mismo con esas personas. Sólo decirte que de esos recuerdos te quedes con los más bellos, los más felices, y que la vida sigue... y hay que vivirla con alegría. Un beso muy fuerte.