Amigos, no entrar al trapo. No ofende el que quiere, sino el que puede. Y ese niñato, mal criado e irrelevante, no puede hacerlo más, de lo que lo han hecho ya, todos sus antepasados explotadores latifundistas e implantadores del derecho de pernada.
¡Habrásevisto!
Que ahora, envalentonado, por los resultaos de las elecciones, este impresentable, quiera darle la razón a los políticos Catalanes. Fue lo más chocante de la entrevista de Jordi a Cayetano, que el hombre que criticaba los PER pertenece a una de las familias terratenientes más importantes del continente y ancestralmente han sido esos señoritos de miles de hectáreas los que han convertido Andalucía en una tierra de jornaleros y no de pequeños agricultores.
¡Habrásevisto!
La cuestión, sin embargo, no es la razón que pueda tener Duran, sino cómo pierde la razón el propio Cayetano. Y la pregunta es hiriente: ¿cómo puede criticar los 200 euros que reciben miles de andaluces necesitados y defender la brutal subvención de tres millones de euros que recibe su familia? ¿No es cultura del subsidio la suya, en versión Gucci? Y peor aún, ¿no tiene nada que ver su familia, que detenta 25.000 hectáreas, con el empobrecimiento del campo andaluz?
¡Habrásevisto!
Como si no fuera con ellos. Como si no fuera por culpa de ellos. Y ese es el quid del debate sobre los PER, que Andalucía decidió enaltecer a sus terratenientes sin ningún debate crítico, y resolver el problema del campo andaluz por la vía de repartir el maná público. La cuestión es si ese diabólico esquema es sostenible por mucho más tiempo. En cualquier caso, lo que no es de recibo es que un Alba critique la débil solución a un problema que han creado familias como la suya, propietarias de pueblos enteros. Es como si el zorro se quejara de que hayan puesto un cercado a las gallinas.
¡Habrásevisto! Intentar dar lecciones quien tanto provecho saca de las subvenciones ¡Habrásevisto!
Dedicado a mi amiga Jaleo, que me lo ha demandado
¡Habrásevisto!
Que ahora, envalentonado, por los resultaos de las elecciones, este impresentable, quiera darle la razón a los políticos Catalanes. Fue lo más chocante de la entrevista de Jordi a Cayetano, que el hombre que criticaba los PER pertenece a una de las familias terratenientes más importantes del continente y ancestralmente han sido esos señoritos de miles de hectáreas los que han convertido Andalucía en una tierra de jornaleros y no de pequeños agricultores.
¡Habrásevisto!
La cuestión, sin embargo, no es la razón que pueda tener Duran, sino cómo pierde la razón el propio Cayetano. Y la pregunta es hiriente: ¿cómo puede criticar los 200 euros que reciben miles de andaluces necesitados y defender la brutal subvención de tres millones de euros que recibe su familia? ¿No es cultura del subsidio la suya, en versión Gucci? Y peor aún, ¿no tiene nada que ver su familia, que detenta 25.000 hectáreas, con el empobrecimiento del campo andaluz?
¡Habrásevisto!
Como si no fuera con ellos. Como si no fuera por culpa de ellos. Y ese es el quid del debate sobre los PER, que Andalucía decidió enaltecer a sus terratenientes sin ningún debate crítico, y resolver el problema del campo andaluz por la vía de repartir el maná público. La cuestión es si ese diabólico esquema es sostenible por mucho más tiempo. En cualquier caso, lo que no es de recibo es que un Alba critique la débil solución a un problema que han creado familias como la suya, propietarias de pueblos enteros. Es como si el zorro se quejara de que hayan puesto un cercado a las gallinas.
¡Habrásevisto! Intentar dar lecciones quien tanto provecho saca de las subvenciones ¡Habrásevisto!
Dedicado a mi amiga Jaleo, que me lo ha demandado