Luz ahora: 0,14973 €/kWh
Hola amigos del foro:
Ya veo que entre visitas, viajes y bichos anda el tema, menudo potaje, jjjjjj
Isabelita, como puedes hacernos esto, irte con Pilar y abandonarnos el día del vino.
Trini, por Dios, déjate los bichos en Suiza, que ya tenemos bastantes aquí en España.
Para mis Encarnas, muchas felicidades, espero que paséis un buen día, para la socia que todo vaya viento en popa, y para la otra espero que te lo estés pasando bien con la visita.
Y ahora lo prometido es deuda, dedicado a Pilar y Pepe:
El sábado 22, nuestros ciclistas fueron a un maratón btt, que organizaba (espero escribirlo bien), La Brigada de Infantería Mecanizada “ Guzmán el Bueno”, situada en el Cerro Muriano, en Córdoba, en plena Sierra Morena.
La primera intención de todos era alquilarnos algo e irnos el fin de semana, y después de titubear, cuatro ciclistas se fueron el mismo día de madrugada y se volvieron al acabar la carrera, nosotros de lo contrario decidimos tomarnos la vida mas relajada, y nos alquilamos una casita rural, en plena sierra, a pocos metros del cuartes donde era la meta, cosa de la que hoy y para el resto de mis días estaré satisfecha.
La decisión fue tomada rápidamente, y por eso el viernes os dije que estaba muy atareada, preparando las maletas, después de comer, nos pusimos en camino, llegamos y a mi me sorprendió la zona, y eso que estoy acostumbrada a estar de sierra en sierra, aquella es espectacular.
El Sábado temprano, el Chache se preparo, y se bajo desde Cerro Muriano hasta Córdoba en su telaraña, ya que la salida era en la ciudad, allí ya estaban sus compañeros, José, Carlos, y otros dos mas. Mis peques y yo, por otro lado, nos fuimos con nuestras telarañas, a explorar el terreno, en el cual nos encontramos con un paso por donde pasaban los participantes, y allí un militar nos informo de algunas cuestiones.
Mientras tanto Jaleo, desde Frailes me llamo, para saber cuando llegarían nuestros ciclistas a la meta, con la intención de venirse para Cerro Muriano, y darle una sorpresa a Carlos en la meta. Con llamadas entre el Chache, Jaleo y yo, la hazaña llego a buen puerto, Jaleo puso rumbo a Córdoba, con su hijo, su nuera y su nieta.
Sobre las dos después de comer, sin tener ni idea de donde iba, cogí el coche, y nos fuimos al cuartel donde estaba la meta, con un poco de “canguelo”, ya que los militares me causan bastante respeto, entramos en el cuartel, en el cual nos dirigieron a una gran explanada, que deduje por la pinta que era donde juraban bandera los militares, donde aparcamos el coche, y después en autobús nos bajaban a la meta, era impresionante la buena organización que aquello tenia.
La hora prevista de llegada de nuestros ciclistas era a las cuatro de la tarde como pronto, y allí en la meta estuve nerviosa perdida, sabiendo que Jaleo venia de camino, y se acercaba la hora, por fin a las cuatro menos cuarto apareció, y ya mas tranquilos todos, esperamos una hora y media mas a que llegaran, sobre todo a Carlos que se sorprendió bastante, cuando vio a su familia, y pudo pasar la meta con su nieta montada en la telaraña.
Mis niños disfrutaron de lo lindo, había una exposición de vehículos del ejército, en los cuales se montaron en todos los tanques que había, se asomaban por las ventanas, en realidad disfrutamos todos, que máquinas tan impresionantes, y sobre todo que miedo dan cuando piensas para lo que sirven.
Los ciclistas una vez habían repuesto fuerzas, tenían que ir a cargar su telaraña en los camiones del ejercito, e irse en autobuses para Córdoba, pero los nuestros decidieron irse en bici hasta Córdoba, el Chache les indico por donde tenían que ir, y se fue al alojamiento mientras nosotros de nuevo en autobús volvimos al aparcamiento, a coger el coche, e irnos con el Chache, Jaleo se volvió a Frailes.
El domingo, estuvimos de turismo por El Cerro Muriano, a pie, en bici, y en coche, lo recorrimos todo, el Chache nos explico, donde hizo el la mili, recordó sus viejos tiempos de militar, y disfrutamos de la esplendida sierra que hay allí.
Los ciclistas también se quedaron impresionados de la sierra tan bonita, sufrieron un poquito porque fueron 80 Km., duros, pero se quedaron con ganas de volver otro año, así que eso es buena señal de que disfrutaron. Y yo por supuesto, también repetiré, así que este fue mi retiro, de meditar como los monjes nada de nada, disfrutar que la vida son dos días. Así ayer lunes que me incorpore al trabajo después de casi dos meses, entre con las pilas cargadas y dispuesta a defenderme ante las adversidades, como lo tendrían que hacer todos aquellos militares que vimos, y que después de todo no causan tanto respeto.
Esto es todo, espero os guste. Feliz día a todos.
Ya veo que entre visitas, viajes y bichos anda el tema, menudo potaje, jjjjjj
Isabelita, como puedes hacernos esto, irte con Pilar y abandonarnos el día del vino.
Trini, por Dios, déjate los bichos en Suiza, que ya tenemos bastantes aquí en España.
Para mis Encarnas, muchas felicidades, espero que paséis un buen día, para la socia que todo vaya viento en popa, y para la otra espero que te lo estés pasando bien con la visita.
Y ahora lo prometido es deuda, dedicado a Pilar y Pepe:
El sábado 22, nuestros ciclistas fueron a un maratón btt, que organizaba (espero escribirlo bien), La Brigada de Infantería Mecanizada “ Guzmán el Bueno”, situada en el Cerro Muriano, en Córdoba, en plena Sierra Morena.
La primera intención de todos era alquilarnos algo e irnos el fin de semana, y después de titubear, cuatro ciclistas se fueron el mismo día de madrugada y se volvieron al acabar la carrera, nosotros de lo contrario decidimos tomarnos la vida mas relajada, y nos alquilamos una casita rural, en plena sierra, a pocos metros del cuartes donde era la meta, cosa de la que hoy y para el resto de mis días estaré satisfecha.
La decisión fue tomada rápidamente, y por eso el viernes os dije que estaba muy atareada, preparando las maletas, después de comer, nos pusimos en camino, llegamos y a mi me sorprendió la zona, y eso que estoy acostumbrada a estar de sierra en sierra, aquella es espectacular.
El Sábado temprano, el Chache se preparo, y se bajo desde Cerro Muriano hasta Córdoba en su telaraña, ya que la salida era en la ciudad, allí ya estaban sus compañeros, José, Carlos, y otros dos mas. Mis peques y yo, por otro lado, nos fuimos con nuestras telarañas, a explorar el terreno, en el cual nos encontramos con un paso por donde pasaban los participantes, y allí un militar nos informo de algunas cuestiones.
Mientras tanto Jaleo, desde Frailes me llamo, para saber cuando llegarían nuestros ciclistas a la meta, con la intención de venirse para Cerro Muriano, y darle una sorpresa a Carlos en la meta. Con llamadas entre el Chache, Jaleo y yo, la hazaña llego a buen puerto, Jaleo puso rumbo a Córdoba, con su hijo, su nuera y su nieta.
Sobre las dos después de comer, sin tener ni idea de donde iba, cogí el coche, y nos fuimos al cuartel donde estaba la meta, con un poco de “canguelo”, ya que los militares me causan bastante respeto, entramos en el cuartel, en el cual nos dirigieron a una gran explanada, que deduje por la pinta que era donde juraban bandera los militares, donde aparcamos el coche, y después en autobús nos bajaban a la meta, era impresionante la buena organización que aquello tenia.
La hora prevista de llegada de nuestros ciclistas era a las cuatro de la tarde como pronto, y allí en la meta estuve nerviosa perdida, sabiendo que Jaleo venia de camino, y se acercaba la hora, por fin a las cuatro menos cuarto apareció, y ya mas tranquilos todos, esperamos una hora y media mas a que llegaran, sobre todo a Carlos que se sorprendió bastante, cuando vio a su familia, y pudo pasar la meta con su nieta montada en la telaraña.
Mis niños disfrutaron de lo lindo, había una exposición de vehículos del ejército, en los cuales se montaron en todos los tanques que había, se asomaban por las ventanas, en realidad disfrutamos todos, que máquinas tan impresionantes, y sobre todo que miedo dan cuando piensas para lo que sirven.
Los ciclistas una vez habían repuesto fuerzas, tenían que ir a cargar su telaraña en los camiones del ejercito, e irse en autobuses para Córdoba, pero los nuestros decidieron irse en bici hasta Córdoba, el Chache les indico por donde tenían que ir, y se fue al alojamiento mientras nosotros de nuevo en autobús volvimos al aparcamiento, a coger el coche, e irnos con el Chache, Jaleo se volvió a Frailes.
El domingo, estuvimos de turismo por El Cerro Muriano, a pie, en bici, y en coche, lo recorrimos todo, el Chache nos explico, donde hizo el la mili, recordó sus viejos tiempos de militar, y disfrutamos de la esplendida sierra que hay allí.
Los ciclistas también se quedaron impresionados de la sierra tan bonita, sufrieron un poquito porque fueron 80 Km., duros, pero se quedaron con ganas de volver otro año, así que eso es buena señal de que disfrutaron. Y yo por supuesto, también repetiré, así que este fue mi retiro, de meditar como los monjes nada de nada, disfrutar que la vida son dos días. Así ayer lunes que me incorpore al trabajo después de casi dos meses, entre con las pilas cargadas y dispuesta a defenderme ante las adversidades, como lo tendrían que hacer todos aquellos militares que vimos, y que después de todo no causan tanto respeto.
Esto es todo, espero os guste. Feliz día a todos.
Capi, ole, ole y ole... cómo me ha gustado leer tu crónica y ver que nos vuelves a ahacer las crónicas de antes... me alegro enormemente amiga, y me alegro que hayáis podido disfrutar de un buen fin de semana en semejante entorno, y como guía a nuestro Chache, recordando su tiempo de mili.
Un beso muy fuerte y que sigan muchas crónicas como esta, y si no tienes crónica de nada, ya sabes, escribes de lo que se te antoje que aquí siempre te estamos esperando; y sobretodo, te esperamos sentir como te hemos sentido con esta crónica.
Un beso muy fuerte para tí y tu bonita familia....
P. D. Inma, dile al Chache que estamos esperando su crónica del día como ciclista, de las que él sabe hacer y del finde como "anfitrión" en el Cerro Muriano, que sabemos esperar....
Un beso muy fuerte y que sigan muchas crónicas como esta, y si no tienes crónica de nada, ya sabes, escribes de lo que se te antoje que aquí siempre te estamos esperando; y sobretodo, te esperamos sentir como te hemos sentido con esta crónica.
Un beso muy fuerte para tí y tu bonita familia....
P. D. Inma, dile al Chache que estamos esperando su crónica del día como ciclista, de las que él sabe hacer y del finde como "anfitrión" en el Cerro Muriano, que sabemos esperar....