Hola a todos.
Esta es mi primera crónica sobre una ruta.
Empezamos:
Ese día me desperté a las 7 a. m. con la ilusión de 30 km que me dicieron. Llegamos a Cogollos a las 9 a. m. en una montaña. Los primeros metros fueron cuesta arriba y abajo, allí fue donde José empezó a burlarme y empezó el campo. En los pinos perdí a mi madre y más adelante había cuestas peores y un río con presas. Más adelante llegamos a una fuente con agua fresquita y después dimos a la carretera muy poco y después una cuesta con mucha sombra subimos a un sitio desde donde se veía Sierra Nevada. Luego bajamos por un sitio con piñas, las más grandes que vi en mi vida y llegamos a un cortijo donde había hierba y una cuesta alucinante. Después llegamos a una tierra roja suelta, como de playa, y llegamos a la carretera y subíamos y bajábamos, subíamos y bajamos y el Carlos me dijo que por eso se llamaba MTBS (en plural) porque MonTas, Bajas y Subes jjjjj. Luego nos metimos en un carril y tuvimos que rodear un portón y más adelante había un río que no me dejaron cruzar. Más adelante había una cuesta que daba a una fuente que tiramos para ayá y cuando volvimos llegamos a un bar y nos estuvimos allí. Después un amigo pinchó y lo esperamos. Unos kilómetros después nos encontramos con mis padres en la primera carretera que luego me quedé el último y vi una ardilla en una presa. Trás pasar el campo vimos vacas y más adelante llegamos por fin al final de etapa. Me hice ¡42 km! y no estaba cansado. Ahora estoy deseando otra vez esa etapa y ahora también deseo Andújar.
Esta es el final de mi primera crónica.
Buenas noches y adiós.
Esta es mi primera crónica sobre una ruta.
Empezamos:
Ese día me desperté a las 7 a. m. con la ilusión de 30 km que me dicieron. Llegamos a Cogollos a las 9 a. m. en una montaña. Los primeros metros fueron cuesta arriba y abajo, allí fue donde José empezó a burlarme y empezó el campo. En los pinos perdí a mi madre y más adelante había cuestas peores y un río con presas. Más adelante llegamos a una fuente con agua fresquita y después dimos a la carretera muy poco y después una cuesta con mucha sombra subimos a un sitio desde donde se veía Sierra Nevada. Luego bajamos por un sitio con piñas, las más grandes que vi en mi vida y llegamos a un cortijo donde había hierba y una cuesta alucinante. Después llegamos a una tierra roja suelta, como de playa, y llegamos a la carretera y subíamos y bajábamos, subíamos y bajamos y el Carlos me dijo que por eso se llamaba MTBS (en plural) porque MonTas, Bajas y Subes jjjjj. Luego nos metimos en un carril y tuvimos que rodear un portón y más adelante había un río que no me dejaron cruzar. Más adelante había una cuesta que daba a una fuente que tiramos para ayá y cuando volvimos llegamos a un bar y nos estuvimos allí. Después un amigo pinchó y lo esperamos. Unos kilómetros después nos encontramos con mis padres en la primera carretera que luego me quedé el último y vi una ardilla en una presa. Trás pasar el campo vimos vacas y más adelante llegamos por fin al final de etapa. Me hice ¡42 km! y no estaba cansado. Ahora estoy deseando otra vez esa etapa y ahora también deseo Andújar.
Esta es el final de mi primera crónica.
Buenas noches y adiós.