La
historia de
Guarromán está ligada al gran proyecto de colonización de
Sierra Morena que, en el siglo XVIII, pusieron en marcha un puñado de ilustrados, encabezados por el rey Carlos III y bajo la intendencia de Pablo de Olavide.
Las razones de esta colonización carolina fueron variadas, una de las más importantes era la necesidad de proteger el
camino real que unía
Madrid con
Cádiz, eje fundamental de las comunicaciones, de los bandoleros que proliferaban en esta zona. La elección del emplazamiento de Guarromán estuvo motivado por la preexistencia en este camino de la Venta de Guarromán.
El modelo de colonización pretendía implantar en esta zona una sociedad campesina ideal, con propietarios de tipo medio, 50 fanegas de tierra por colono, que pudieran ser autosuficientes; y se les facilitaba lo necesario para su puesta en cultivo. El territorio se dividió en núcleos principales, feligresías, una de ellas era Guarromán, de las que dependían una serie de aldeas, que tenían como finalidad acercar al campesino a su tierra. En el caso de Guarromán las aldeas fueron: Aldea de los
Ríos,
Martín Malo y Aldea del Altico.
En 1767 llegaron los primeros colonos traídos por el aventurero bávaro Thürrieguel desde distintos puntos de Europa central. En el caso de Guarromán procedían mayoritariamente de
Alemania. La puesta en marcha del proyecto no estuvo exento de dificultades y desencantos, con todo, el proyecto y la colonización ideada por Pablo de Olavide, poco a poco se fue haciendo realidad.
Según la
tradición Pablo de Olavide tenía predilección por este lugar, al que quiso llamar Muzquía (en honor a don Miguel Muzqui que ocupaba la secretaría de Estado y despacho universal de hacienda), pero finalmente aceptó el de "
Río de los Granados", como era conocido, colocándole a una de sus aldeas el apellido de su esposa (Aldea de los Ríos).
Viajeros, extranjeros y nacionales, se hicieron eco en sus notas de este nuevo asentamiento, de la belleza del enclave y el carácter de sus pobladores. Uno de estos fue Towsend que en el viaje que realizó por
España entre 1786 y 1787, al llegar a Guarromán escribía: "Guarromán,
pueblo que contiene cien
familias, cada una de las cuales posee cincuenta fanegas de tierra. La mayor parte de los habitantes son alemanes, que por su industria y frugalidad, hacen honor a su patria."
Tanto el
paisaje urbano como el paisaje agrario de Guarromán son testimonio de esta historia.