aguilachic, siento lo de tu madre, es un trago duro de llevar, pero es la realidad de la vida, que nacemos estamos y nos vamos. mucha fuerza, y la vida sigue, ya no es lo mismo, pero hay que continuar animo, un abrazo.
Gracias Marci, ya la estamos echando mucho de menos pero como tú dices la vida sigue y tenemos que seguir hacia delante y pensar que para estar como estaba sufriendo no merecía la pena estar así y eso nos conforma.
abrazos!
abrazos!