La lluvia y el viento eran dos hermanos
corriendo furiosos por el terraplén,
y en un banco obscuro, mojado y mugriento
él se acomodaba su uniforme gris
El viejo Matias duerme en cualquier parte,
un fantasma errante le toca la piel
Pero cuando llueve sus despojos buscan
la estación de chapas de Paso de Rey
Es cuco de niños y de no tan niños
su figura triste cruzando el andén
porque nadie ha visto sus ojos cansados,
la cruz del olvido temblando a sus pies
A veces murmura cosas incoherentes,
habla de la guerra, imita al cñon,
otras veces pone en sus ojos un niño
y acuna en sus brazos su bolso marron.
Cuando llegan trenes repletos de obreros
se pone contento, brilla su mirar.
Gorrión de la tarde, quiere hablar con todos,
y después se queda solo en el andén.
Se queda mirando las vias vacias,
la luz que se pierde del tren que pasó,
y despues se aleja, murmurando cosas,
el viejo Matias ogro del lugar.
Victor Heredia
corriendo furiosos por el terraplén,
y en un banco obscuro, mojado y mugriento
él se acomodaba su uniforme gris
El viejo Matias duerme en cualquier parte,
un fantasma errante le toca la piel
Pero cuando llueve sus despojos buscan
la estación de chapas de Paso de Rey
Es cuco de niños y de no tan niños
su figura triste cruzando el andén
porque nadie ha visto sus ojos cansados,
la cruz del olvido temblando a sus pies
A veces murmura cosas incoherentes,
habla de la guerra, imita al cñon,
otras veces pone en sus ojos un niño
y acuna en sus brazos su bolso marron.
Cuando llegan trenes repletos de obreros
se pone contento, brilla su mirar.
Gorrión de la tarde, quiere hablar con todos,
y después se queda solo en el andén.
Se queda mirando las vias vacias,
la luz que se pierde del tren que pasó,
y despues se aleja, murmurando cosas,
el viejo Matias ogro del lugar.
Victor Heredia
Como iba diciendo: cogí la burra y salí corriendo.
El poema me recuerda el estilo de Víctor Manuel en su poema “El abuelo Víctor”, por la forma de describir en estilo sencillo y claro en una pincelada la historia de una vida que no es poco.
Hablando de cantautores, a mí un que me gusta mucho aunque sea un estilo distinto de explicar los sentimientos es este:
Cada cual vaya diciendo lo que quiera
se lo lleva la corriente
por la carretera
ves pasar la gente
y tu sangre permanece indiferente.
Tú le pides a tu Dios por las mañanas
que lo malo no te coja
después le pides al viento
que te arrastre las hojas
rezas por la lluvia y no te mojas.
Está muy bien eso del cariño
yo me comprometo
pero no me des un dulce como a un niño
te estoy hablando de respeto.
Ya ha llegado el sol a lo más alto
¿qué puedo yo hacer?
No puedo mirarlo
ni vivir sin él
todavía tengo mucho que aprender.
Dices que la noche se hace larga
más largo es el día
regaré tus flores
si tú riegas las mías
cada bicho va buscando su armonía.
Mira aquella luz cómo disfruta
en la oscuridad
sólo le preocupa
que la vean los demás
móntate en su grupa.
(José María López Sanfeliu)
Salu2
El poema me recuerda el estilo de Víctor Manuel en su poema “El abuelo Víctor”, por la forma de describir en estilo sencillo y claro en una pincelada la historia de una vida que no es poco.
Hablando de cantautores, a mí un que me gusta mucho aunque sea un estilo distinto de explicar los sentimientos es este:
Cada cual vaya diciendo lo que quiera
se lo lleva la corriente
por la carretera
ves pasar la gente
y tu sangre permanece indiferente.
Tú le pides a tu Dios por las mañanas
que lo malo no te coja
después le pides al viento
que te arrastre las hojas
rezas por la lluvia y no te mojas.
Está muy bien eso del cariño
yo me comprometo
pero no me des un dulce como a un niño
te estoy hablando de respeto.
Ya ha llegado el sol a lo más alto
¿qué puedo yo hacer?
No puedo mirarlo
ni vivir sin él
todavía tengo mucho que aprender.
Dices que la noche se hace larga
más largo es el día
regaré tus flores
si tú riegas las mías
cada bicho va buscando su armonía.
Mira aquella luz cómo disfruta
en la oscuridad
sólo le preocupa
que la vean los demás
móntate en su grupa.
(José María López Sanfeliu)
Salu2