HUESA: Recuerdo bastante nítidamente la última vez que vi...

Recuerdo bastante nítidamente la última vez que vi cantar al Maleno, el Peseta, en Huesa. Eran, creo recordar, las fiestas del pueblo, anochecía y de forma un tanto espontánea empezó todo. Un grupo de paisanos, quizá alentado por la situación lúdico-festiva, le pidió que cantara algo, él, el Maleno, que necesitaba poco para arrancarse, accedió de inmediato, se encaramó a la fuente que habñia adosada a la casa de Juanico Costillas y empezó su repertorio ante el fervor y el reconocimiento de los que allí estábamos:
- Mi corazón, se lo llevan las niñas del río,
- mi corazón, hace tiempo lo tengo perdío,
cantaba, entre otras cosas, emulando a su adorado y revenrenciado Manolo Escobar. Luego el repertorio fue más allá y cantó incluso cosas de Rafael Farina, tan difícil de emular.
Teníamos una buena relación. Era rudo, brutote, noble, sensible.
Al poco tiempo, como tanta y tanta gente, emigró. A partir de ahí nos vimos esporádicamente cuando iba por el pueblo y después coincidimos poco, casi nada. Probablemente haga más de 35 años que no nos vemos.
No lo vi en directo en Telecinco, lo vi en Youtube a raiz de citarlo Dulcinea en este foro. He de confesar que se me saltaron las lágrimas. Ahí estaba él, igual de rudo, brutote, noble y sensible. Era sin duda él, obviamente con más años, no tan ajado como suelen estar los moradores del pueblo de su misma edad, se conservaba bien. No desaprovechó la ocasión de hacer patria más beien al contrario, con habilidad metió la cuña de su procedencia a la primera ocasión que tuvo. Luego, de forma atípica para como se desarrollan las cosas en ese programa, cautivó con esa voz profunda que el tiempo y el hábito han pulido a toda la audiencia y a los famosillos presentes que no podían disimular en el primer plano la sensación que producía el canto del Maleno en ellos.
Cuando la bolsa de las canciones internas, mentales y mudas se llena, necesita salir al aire. Me gustaría, como imagino ocurrirá con todos los paisanos y todos aquellos que lo conocen, que su presencia en este programa fuera un espaldarazo para lo que mencionaba antes, para que se diera a conocer. No tanto (y si es así mejor) por lo que le pueda repercutir en el aspecto económico sino por esa necesidad que tiene todo aquél que hace las cosas bien que el mundo sepa de su existencia.
Apoyémosle todos como mejor sepamos ó podamos, en su nueva comparecencia.
Saludos a todos.